En el otro rincón del mundo, en medio de una importante cobertura deportiva, Gastón Edul vivió una insólita situación que rechazó. Al periodista deportivo y ex participante de Bake Off “le ofrecieron mujeres” por la fama que le generó el dar una nota para un programa Indonés. “Era todo turbio”.
“¿Recordás qué fue lo más picante que viste en alguno de estos viajes?”, le consultó el conductor de Terapia Picante, por El canciller, a Gastón, sobre sus distintos viajes por el mundo por su rol de periodista deportivo. “Como divertido, en Indonesia, que viajé para allá para cubrir a la Selección Argentina…”, introdujo Edul en su relato.
“Me hizo una nota como, ponele, alguien que yo no sabía quién era… Yo, la verdad, estaba al palo laburando, me pusieron un auto en la puerta y digo ´bueno, listo, es una hora´“, contó el comunicador sobre el motivo por el que dio la nota.
“Era una limousine, empiezo a averiguar (quién era la conductora), no encuentro nada. Hago el programa, salgo y 250.000 seguidores más en Instagram. Era una barbaridad que no tenía sentido. Yo dije ´uh, me metieron bots´. Hasta que un argentino, Messiniti, que jugó en Indonesia, me dijo ´no, no, es la Susana Giménez de Indonesia´”, compartió Gastón. “Entro a la cuenta y tenía 40 millones se seguidores, era mega, ultra famosa”, agregó.
GASTÓN RECHAZÓ A TODAS LAS CHICAS
“Voy al hotel, me dejan ahí y al otro día me dicen que la periodista me dejó regalos. Me regaló un celular, túnicas de Indonsesia, comidas típicas, una especie de adorno que era una daga toda revestida, hermosa que, supuestamente, era para mi madre como un símbolo de respeto”, enumeró Gastón sobre los obsequios que recibió por haber participado del programa.
“Salgo y me empiezan a pedir fotos los indonesios por el programa. Y en un momento, uno que yo no sabía quien era, también de Indonesia viene y me dice ´ mirá, no sé cómo decírtelo, es incómodo, yo te traje para que elijas´. Yo me estaba yendo a la cancha… ´¿Viste las chicas acá?´. Y le respondí ´no, no, pará, no me metas en quilombos. Había llevado minas, te lo juro. Era todo turbio. Le dije que no y que le agradecía”, cerró Edul.