Ciudad de México, 9 ene (EFE).- El Centro de Documentación de Prisiones Cubanas (CDPC) registró en diciembre pasado 105 denuncias de personas encarceladas en Cuba, en su mayoría (78) relativas a violaciones de derechos, según el informe mensual de esta ONG publicado este jueves.
Esta plataforma independiente -con sede en México- señaló que las formas de represión más frecuentes fueron los incidentes de hostigamiento y represión (52), la negación de atención médica (22), las malas condiciones de vida en prisión (17) y los problemas con la alimentación (16).
Asimismo indicó que en el último mes de 2024 se documentaron otras 25 modalidades de represión contra los reclusos que incluyen golpizas, celdas de castigo, restricciones a la comunicación y negaciones de derechos.
Los territorios con mayor cantidad de reportes de violaciones fueron las provincias Santiago de Cuba (18), La Habana (17) y Camagüey (13), y en el apartado de las prisiones, las de Boniato, en Santiago de Cuba (este), el Combinado del Este, en La Habana (oeste) y la prisión de Quivicán, en la también occidental provincia Mayabeque, según el informe.
La CDPC también añadió que al menos 47 reclusos -6 mujeres y 41 hombres- fueron víctimas de alguna violación en ese periodo y 18 denuncias se refirieron a problemas que afectan a la totalidad de la población penal de una prisión determinada.
Denuncia que los prisioneros Frank Morales Cuesta, Yosvany Sánchez y Jorge Luis Torres Vaillant, que padecían tuberculosis, diarreas y desnutrición, fallecieron por mala atención médica.
Además menciona los casos de otros dos reclusos que murieron. Uno tras ser presuntamente agredido por presos y el otro, tras recibir una golpiza por cuenta de guardias del penal, según los testimonios a los que da veracidad esta ONG.
El CDPC señaló con más denuncias de represión a los presos políticos José Daniel Ferrer, Andrés Lugo Pérez, Gustavo Colás Castillo, y al recluso común Torres Vaillant.
Considera que las restricciones a la comunicación fue uno de los problemas más reportados, especialmente por las fe has navideñas, a lo que sumó la suspensión de las visitas familiares y los castigos a los presos que denunciaron su situación a través de llamadas telefónicas.
En particular cita a los presos políticos, afrodescendientes y opositores dentro de las categorías de vulnerabilidad “más recurrentes” con mayor cantidad de violaciones. EFE