“La carne de cabra es una alternativa más saludable a otras carnes rojas como la carne de res, de cordero y de cerdo. Es naturalmente magra, muy nutritiva y tiene numerosos beneficios para la salud. Tiene menos grasas saturadas, más hierro y aproximadamente la misma cantidad de proteínas. Incluir carne de cabra en la dieta podría reducir el riesgo de obesidad”. Este texto proviene del Instituto Nacional de Alimentos y Agricultura de Estados Unidos, un documento que tal vez había leído un joven de 25 años que acaba de ser detenido en Francia por maltrato animal.
El suceso ocurrió el pasado domingo cerca de la estación de tren de Part-Dieu en Lyon, la principal de la ciudad, donde de repente algunos transeúntes se alarmaron por unos ruidos extraños que provenían de una gran bolsa de deporte que llevaba una persona. De ella provenían lo que parecían ser (y eran) gritos de dolor de un animal. Cuando los paseantes se acercaron para ver qué ocurría, vieron que se trataba de una cabra joven, de pequeño tamaño, que el hombre que llevaba la bolsa de deporte trataba de transportar discretamente por la calle.
No tuvo éxito en esa discreción. Según los testigos que cita el medio local Le Progrès, la cabra estaba amordazada y con las patas atadas con una cuerda, de la que trataba de liberarse. Para silenciarla, el hombre la golpeaba, intentaba retorcerle el cuello y golpeaba su cabeza contra el suelo, provocando los alaridos del animal. Una persona llamó a la policía, que rápidamente detuvo al sospechoso y lo puso bajo custodia.
Interrogado por las autoridades, el sospechoso confesó que había comprado al animal de manera clandestina y tenía la intención de sacrificarlo ilegalmente para su consumo.
La policía contactó con la Sociedad Protectora de Animales de Lyon, que presentó una denuncia por malos tratos graves y actos de crueldad contra un animal. Se ha abierto una investigación para identificar la procedencia de la cabra, que carece de trazabilidad.
Una vez bajo el cuidado de la Sociedad Protectora de Animales, un veterinario examinó al animal, que fue trasladado a un refugio para ser atendido. Ahora se espera que esté disponible para adopción a finales de esta semana. Sea adoptado por un profesional o un particular, este proceso debe ser declarado ante la Cámara de Agricultura y el animal debe estar identificado con un anillo, un procedimiento que ya ha sido realizado por el equipo de la Sociedad Protectora de Animales de Lyon.
Y en España, ¿se podría adoptar a una cabra para tenerla como mascota? Según la ley de bienestar animal, se consideran animales de compañía los perros, gatos y otras especies domésticas o silvestres en cautividad, siempre que puedan tener condiciones de bienestar y que su posesión no tenga como destino su consumo o el aprovechamiento de sus producciones. Además, todos deben estar registrados e identificados con microchip o anilla.
Por tanto, sólo estaría permitido tener cabras domésticas o de granja —y no de montaña, por ejemplo—, y en ningún caso sería posible sacrificarlas para comerlas.