mike-amigorena-pone-todas-las-fichas-a-la-musica,-hace-shows-gratis-en-geriatricos-y-recomienda-que-las-parejas-no-convivan-todo-el-tiempo

Mike Amigorena pone todas las fichas a la música, hace shows gratis en geriátricos y recomienda que las parejas no convivan todo el tiempo

Un álbum hace ocho años (Amántico), otro (Daa) hace cinco y el tercero hace apenas dos meses atrás. La discografía de Mike Amigorena no es abundante pero tampoco es algo para despreciar. De hecho, tres trabajos en menos de una década no está nada mal, especialmente teniendo en cuenta sus demás actividades artísticas.

A saber: en todo este tiempo también actuó -por ejemplo- en la película Jaque mate y en el programa de televisión Quiero vivir a tu lado, hizo teatro con las obras Cabaret y ART, además de papeles secundarios en series como Otros pecados, María Marta el crimen del country y División Palermo.

Pero eso no es todo, porque si algo caracteriza a Mike no es solamente su talento desbordante, sino su permanente inquietud artística y búsqueda de nuevos proyectos, por ejemplo la labor silenciosa y solidaria que hace actuando gratis en geriátricos de la Ciudad.

Mike Amigorena acaba de lanzar Mike Amigorena acaba de lanzar «El increíble cool», su tercer álbum como solista. Foto de prensa gentileza Cande AllendeAhora volvió con todo a la música. Lanzó el disco El increíble cool, lo presentó en Café Berlín, y tiene armada una gran gira por el interior del país y Gran Buenos Aires.

De hecho, «limpió» su agenda para poner todas las fichas a defender estas canciones con sonido electropop, como el surrealista Lemon pie, el lento rap de Desapego y el bailable Tesoro, dedicado a su hijita.

Un padre con dos casas

Antes de estos tres discos como solista, la faceta musical de Mike Amigorena se hizo pública con el grupo Ambulancia en 2005, junto a la actriz Muriel Santa Ana y otros músicos. Luego, en el 2012 formó Mox, un proyecto indie-dance con Ale Lacroix, Oliverio y Mei Ying Tui.

Mike Amigorena con su moana por las calles de Chacarita, su barrio de los últimos años, que ahora alterna con su familia en Olivos. Foto: Fernando de la OrdenMike Amigorena con su moana por las calles de Chacarita, su barrio de los últimos años, que ahora alterna con su familia en Olivos. Foto: Fernando de la OrdenSentado en un viejo bar de Chacarita y abrigado con una moana, Mike cuenta detalles de su momento actual, donde además de la actividad artística tiene una hija de 4 años llamada Miel. Alterna vivir con ella y con su pareja Sofía Vítola en Olivos, y cada tanto quedarse uno o dos días en su casa en Chacarita.

«La dinámica -dice- es muy recomendable. Se da la posibilidad de extrañar y de pensar en el reencuentro, además de conservar una individualidad. Sino es muy difícil. Creo que esta es de la única manera que no perezca la relación».

-¿Te imaginabas como padre?

-Sí, me lo imaginaba. No fue un desafío, sino darte cuenta que solo es otro mundo. La planificación es lo que decide. Es la única manera de llevar adelante un vínculo, tu trabajo y tu pasión. Y Miel me va conquistando con su personalidad y sus deseos ocultos. Si bien lamento el paso del tiempo, lo agradezco porque ahora está más grande y esa personita está más creativa.

La libertad y la plenitud

Si Mike Amigorena tuviera que dar un consejo a un chico de 19 que quiere dejar, como hizo él, su provincia y venir a Ciudad de Buenos Aires, le diría que recorra el mundo y luego vea si quiere volver.

«Que no se presione por nada y que vaya fijándose qué quiere hacer. Que salga del secundario y se tome dos añitos para viajar y hace cosas, trabajando en lo que venga, como hicimos todos, desde cadete hasta delivery», sentencia.

Mike Amigorena. Foto de prensa gentileza Cande AllendeMike Amigorena. Foto de prensa gentileza Cande Allende-¿Cómo ves tu carrera discográfica; te hubiera gustado grabar más seguido?

-Siempre tenía que alternar, entre otras cosas, con el teatro, el cine y la televisión. Y la verdad es que es imposible que las carreras estén a la par. La música realmente requiere de otro comportamiento. Puedo ser conocido y reconocido con la actuación, pero sin dejar de lado ser performático en el escenario.

Me parece muy lógico hacer ambas cosas y realmente se hace tangible el vehículo, el instrumento. Se dio así. Cuando empecé con Ambulancia no podía dejar de actuar para dedicarme a la música que era incipiente. Me voy convirtiendo en disponible para lo que va aconteciendo.

-Supongo que tenés que planificar los rodajes y las obras de teatro con tiempo.

-Hace mucho que no hago teatro. Desde exactamente un año atrás, con ART. La verdad que no tengo deseo de hacer teatro, porque quiero buscar el proyecto musical y el concepto musical requiere de una continuidad.

-Quizás al principio tenías que contar por qué eras cantante y actor, pero a esta altura no tenés nada que explicar.

-Tiene que ver con todo lo que es inasible. Y todo es consecuente porque mi vida es así. Tiene un costo, claro, pero ésta es la plenitud y la libertad. ¡Si no hay sorpresas, no va a haber sorpresas! (sonríe) Solamente hay que respetar lo que ya se consiguió y se va a recibir con cariño, con admiración encima. Mi trabajo es sorprender desde un estado que no es la sorpresa.

No me quejo si lo que me divierte más es surrealista y me permite vivir del error. Cuando quiero ser preciso, tengo que estar muy respaldado, porque ahí viene la sorpresa.

Ni Hulk ni Cool

Según Mike, el título de El increíble cool surgió a mitad de camino. «No sé por qué -confiesa- se me vino el increíble. Lo asocié con esta parte de mi vida, con un estilo que no necesariamente tiene que ser frívolo. Y se puede hacer el juego de palabras con el increíble Hulk».

La tapa del nuevo disco de Mike Amigorena. La tapa del nuevo disco de Mike Amigorena. -¿Empezó a tomar forma durante la pandemia o antes?

-Arranqué en el 2019, pero aproveché la pandemia para escribir y cocinar. De hecho, ahí fue cuando hice las canciones y también cuando inventé un plato especial para comer pasta larga, con una concavidad más profunda.

El disco fue un proceso largo de casi cuatro años. No me gusta trabajar solo, así que lo hice con Dante Saulino. Prefiero que al menos que me den un boceto o una buena base, y ahí le empiezo a dar forma. Tampoco me gusta pasar mucho tiempo con una canción, porque no tiene sentido.

-Al tener la visión tan performática, ¿cuando estás componiendo el tema ya estás pensando en el escenario?

-Sí. Cierro los ojos y veo lo que hago en el escenario.

-¿Jubilandia, tu ciclo de shows en geriátricos, fue post-pandemia?

-No. Comenzó en el ’17. Surgió por la vida que te une y termina exponiendo la afinidad que tenés con los abuelos que te criaron en la tercera edad. Canto tangos y recito poemas.

Una vez cada 15 días llamamos por teléfono a un geriátrico y vamos a cantar canciones clásicas que me vuelven loco, desde zambas hasta boleros. ¡Les brillan los ojitos durante todo el show y cuando terminamos preguntan cuándo volvemos! Los dejamos encendidos y para nosotros también es abrumador tanto agradecimiento. Es una simbiosis. El antídoto contra todo.

Mike Amigorena continúa con Mike Amigorena continúa con «Jubilandia», su ciclo de shows gratuitos en geriátricos. Foto de prensa gentileza Cande Allende-Para terminar, ¿cómo viene el 2025?

-Tengo algo. Me refiero a la composición de canciones. Ayer me junté con un productor, Joaquín Bernabé, que me parece muy bueno. De la actuación solo tengo una película en octubre, pero eso siempre está atravesando las canciones. Todo lo que sea audiovisual es manejable, como una película o una miniserie. El punto es cuando hay una oferta de una película, ¿cómo le digo que no?