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El CEM, entre Cornejo y Milei: ponderó la baja de la deuda y pidió mantener el «orden fiscal»

En coincidencia con la presentación del proyecto de Presupuesto 2025 que hizo el propio presidente Javier Milei ante el Congreso, el Consejo Empresario Mendocino (CEM) emitió un nuevo informe de deuda provincial de Mendoza. Y si bien destacó su baja, considerándola «sostenible» pidió que el gobierno de Alfredo Cornejo mantenga «el orden fiscal».

El reporte, que analiza la evolución de la deuda pública de Mendoza entre 2014 y 2024, destaca logros de gestión de Hacienda en los dos últimos gobiernos provinciales. Al mismo tiempo, el CEM se hace eco de los principios con los que siempre insiste Milei, como mantener las cuentas saneadas y aminorar el peso del Estado sobre la economía.

Al respecto, toma como punto de partida los últimos datos oficiales, que indican una deuda total de U$S755 millones ($688.415 millones a junio pasado). Y una deuda consolidada de U$S693 millones ($631.574 millones).

Su evolución marca que la deuda emitida en pesos cayó 88% en 10 años. Y a la vez subió 2% en dólares durante el mismo período.

Deuda 2024 versus 2014

Así las cosas, la deuda total de la Administración Central es hoy 45% menor que la registrada en diciembre de 2014 y 63% más baja que la que existía en plena pandemia, a fines de 2020.

Pero casi al promediar la década el país atravesó una crisis, que incluyó una fuerte devaluación. Aún con ese hecho, el balance en cuanto a compromisos de la provincia en dólares para el CEM da positivo, tanto en relación a diez años atrás como al crítico 2017.

«Es 43% menor a la de diciembre de 2014 (U$S1.323 millones) y 61% debajo de 2017 (U$S1.924 millones) cuando alcanzó su máximo durante el período de ordenamiento fiscal iniciado en 2016 con la emergencia administrativa, fiscal y financiera del Estado provincial», señala el reporte del Consejo Empresario Mendocino.

Incluso medida per cápita también se puede sopesar mejor. ¿Cuánto pesa la deuda sobre cada mendocino/a?.

La deuda por habitante medida en dólares a junio de 2024 llegó a U$S365, casi la mitad de la de 2014 (U$S706). Y si se compara con el pico de 2017 (U$S992), es 63% más baja.

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Fayad y Cornejo tienen varios vencimientos de deuda por delante. Sin embargo, el CEM valoró la reducción lograda desde 2017

Fayad y Cornejo tienen varios vencimientos de deuda por delante. Sin embargo, el CEM valoró la reducción lograda desde 2017

Los principales acreedores de Mendoza

A la vez ¿a quiénes le debe la provincia de Mendoza?

En términos de los casi U$S700 millones de deuda consolidada, el CEM también puso en orden de los principales acreedores según moneda de la deuda contraída:

1) Gobierno Nacional: $1.566 millones (a junio 2024)

2) Banco de la Nación Argentina (BNA): $12.562 millones.

3) Otros bancos comerciales nacionales e internacionales

4) Organismos multilaterales de crédito, entre ellos, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (BIRF): U$S192 millones

5) Tenedores de bonos denominados en moneda local y en dólares: U$S392 millones.

El «peso» del Estado en la economía

En ese aspecto, el análisis del CEM observa cómo la presión tributaria, que había alcanzado un máximo histórico entre 2014-2015, empezó a descomprimirse gradualmente a partir de una situación límite en la gestión de recursos.

El análisis atribuye el crecimiento de la deuda provincial hasta 2017 a «medidas de gobierno que destruyeron el ahorro corriente y el resultado operativo, y en el efecto acumulativo que generó. El peso del Estado en la economía local creció entre 2004 y 2015 en desmedro de la participación del sector privado productivo».

En términos de balanza fiscal, para el CEM eso «pulverizó el resultado corriente». Y de esa manera, la provincia pasó de un superávit de 18% en 2005 a un déficit de 7% de los recursos corrientes en 2015«.

Ni más ni menos que una caída de 25 puntos porcentuales en 10 años, que ni siquiera la suba de impuestos entre el 2012 y 2015 pudo revertir. Los pagos o servicios de deuda, que habían trepado de 5% al 12% de los recursos corrientes en 2013-2017, se recortaron a 9% el último año.

Sin embargo, que actuamente el 15% de la deuda consolidada sea en pesos y el restante 85% en dólares no deja de ser una realidad preocupante que explica la decisión de «rollear» algunos vencimientos.

Aún así, para el CEM es «sostenible, pues la dinámica y razonabilidad de la política fiscal permite afrontar los pagos sin sobresaltos». Un ejemplo: bono Mendoza 2029, que es 70% de la deuda en dólares pero al vencimiento debería representar sólo 7,5%.

Orden fiscal, el camino a seguir

En cierto modo, los analistas del CEM toman la vara que dejó Cornejo en su primer gobierno para comparar lo hecho desde entonces en materia de administración financiera provincial para ordenar las cuentas. Incluída la gestión del ex gobernador Rodolfo Suarez.

Así, destacan que el orden fiscal conseguido se evidencia en 4 puntos:

1) superávit corriente en 5 de los últimos 6 años

2) superávit operativo en los 3 últimos ejercicios

3) niveles de deuda pública menores a los de 2014

4) gasto público y recursos tributarios provinciales más bajos, en términos reales que en 2017 (medido por IPC).

Incluso el CEM destaca el hecho de que la Provincia tenga U$S1023 millones del fideicomiso Portezuelo del Viento en su cuenta bancaria. Un monto equivalente a 1 vez y media la deuda provincial consolidada, de U$S693 millones.

Tal vez por ese balance, además de pedir el tratamiento de una nueva Ley de Responsabilidad Fiscal, desde el Consejo Empresario pregonan, en tiempos del «no hay plata» y el principio de que «el superávit no se negocia» que Milei repite como mantra, que «ese orden fiscal iniciado en 2016 debe seguir».

Y no ahorran menciones a los principios para lograrlo, como «enfatizar la gestión austera y eficiente del gasto, en la calidad de servicio a los ciudadanos, y buscando disminuir la carga tributaria sobre el sector privado, pues el tamaño del Estado no debiera ser mayor al que éste puede financiar sin ahogarse».