La salida inesperada de Paulo Dybala en el entretiempo del debut de la Roma frente al Athletic de Bilbao por la Europa League generó preocupación. En la capital italiana temieron que se tratara de un nuevo problema físico para la “Joya”, pero el propio jugador llevó tranquilidad en el vestuario del Estadio Olímpico. Este viernes se sometió a estudios médicos.

A primera hora, el campeón del mundo y de América con la Selección Argentina, quien había sido reemplazado por su compatriota Matías Soulé en el empate 1-1 ante los vascos, visitó una clínica para realizarse estudios que determinaran si había alguna lesión en los flexores de la pierna izquierda.

Para alivio suyo y de sus compañeros, los exámenes confirmaron que solo padece una fatiga muscular. Debido a esto, el técnico Ivan Jurić decidió preservarlo y no lo convocará para el partido de este domingo contra el Venezia por la Serie A.

Dybala trabajará de manera diferenciada durante algunos días en el centro deportivo de la Roma, bajo la supervisión del cuerpo médico. El objetivo es no arriesgarlo en el próximo compromiso del torneo local, con la esperanza de que esté en plenitud para el partido contra Elfsborg en Suecia, el próximo jueves, por la Europa League.