Más de un millón de personas fueron desplazadas por los continuos bombardeos israelíes en todo Líbano, incluido uno registrado a primera hora de la mañana de este lunes en una zona residencial del centro de Beirut, la capital del país, lo que aumenta los temores de una invasión a gran escala.
La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) informó que unos 100.000 desplazados han llegado a la vecina Siria en los últimos días. “El flujo de salida continúa”, dijo el Alto Comisionado de ACNUR, Filippo Grandi, en un tuit, acompañado de una foto de cientos de personas apiñadas en un cruce fronterizo entre Siria y el Líbano.
Grandi señaló que los equipos de la agencia están disponibles en cuatro puntos de cruce dentro de Siria para apoyar a los recién llegados.
El éxodo aumentó tras la escalada de hostilidades entre el Ejército israelí y el grupo armado Hezboláh con base en el Líbano, cuyo líder de larga data, Hassan Nasrallah, murió el viernes en un bombardeo israelí sobre edificios civiles.
Por otra parte, Hamas anunció que su líder en Líbano, Fatah Sherif al-Amin, resultó muerto junto con su familia en un ataque aéreo contra un campo para palestinos refugiados.
Nueve refugios
ACNUR y otros organismos de la ONU, incluida la Agencia para los Refugiados Palestinos (UNRWA), proporcionan ayuda a la población desplazada. La UNRWA ha abierto nueve refugios que albergan ya a unas 3500 personas.
“En estos refugios, la Agencia brinda una ayuda basada en la imparcialidad y la no discriminación, acogiendo a refugiados palestinos, libaneses y sirios, asistiendo a todos los necesitados”, dijo el portavoz de UNRWA en Líbano, Fadi El Tayyar.
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), señaló que el 90% del millón de personas desplazadas huyeron de sus hogares en la última semana.
“El desplazamiento ahora supera la guerra de 2006, desencadenada por intensos ataques israelíes y órdenes de evacuación de civiles”, apuntó OCHA en un tuit.
Según el Ministerio de Salud de Líbano, los ataques israelíes han matado a 105 personas a partir del domingo.
Riesgo de enfermedades
La Organización Mundial de la Salud (OMS), por su parte, advirtió que el desplazamiento y las precarias condiciones de vida en los refugios aumentarán el riesgo de enfermedades, en particular las transmitidas por el agua y las que se pueden prevenir con vacunas.
La OMS destacó el cierre de centros de salud y la escasez y cansancio extremo del personal sanitario de primera línea. Igualmente.
Además, explicó que las condiciones de seguridad no permiten transportar a los pacientes de una instalación sanitaria a otra cuando el centro al que llegan no tiene la capacidad para atenderlos, como ocurre a menudo.
Niña artista muerta
Entre las víctimas del bombardeo del fin de semana se cuenta Selena al Smarah, de seis años, asesinada junto con sus padres en su casa de la ciudad sureña de Tiro el sábado. Su hermana Celine, de diez años, sobrevivió, pero sufrió heridas en el ataque.
Las hermanas asistían regularmente a un taller de arte dirigido por la ONG Tiro Association for Arts, que tiene centros en Tiro y Trípoli, en el norte.
“Continuaremos nuestro trabajo por estos niños y jóvenes en estos tiempos de guerra durante el tiempo que sea necesario”, dijo el actor y director Kassem Istanbouli, que dirige al grupo de voluntarios. Su objetivo es fomentar la educación artística en zonas marginadas de todo Líbano y forjar vínculos entre comunidades divididas.
El año pasado, Istanbouli recibió el premio Sharjah para la cultura árabe de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). En 2021, el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, reconoció los esfuerzos de Istanbouli por involucrar a los jóvenes en un cambio positivo y por reabrir los teatros cerrados por la guerra de 2006 entre Israel y Hezboláh.
Istanbouli relató que las hermanas al Smarah asistían a talleres mientras sus padres vendían maíz dulce y frijoles en un pequeño puesto cerca del Teatro Nacional Libanés en Tiro. “Todos los días, ella y su hermana venían al taller de capacitación, y todos los días Selena decía: ‘Profesor Kassem, ¿hoy tenemos clase de dibujo?’ Y se alegraba cuando le decía que sí… el mundo debería garantizar que se rindieran cuentas por este horrible crimen contra Selena”.