En la Cámara de Diputados, se designó a Sebastián Dávila como el nuevo Fiscal de Estado de la Provincia. Tal como se esperaba, se impuso el nombre que impulsó el orreguismo para un cargo clave, como es el abogado encargado de defender los intereses provinciales. Previo a que los legisladores levantaran sus manos en señal de aprobación, el diputado de la Libertad Avanza, Fernando Patinella, se levantó de su banca. No participó solo de esa votación.
El gesto llamó la atención y hubo quienes se preguntaron si no fue un mensaje a Juntos por el Cambio luego de que las diputadas Nancy Picón y María de los Ángeles Moreno no acompañaran el veto del presidente Javier Milei al financiamiento universitario. Los mileístas sanjuaninos no le esquivaron a la pregunta y aseguraron que “fue una respuesta”.
Patinella viene acompañando los proyectos del gobierno provincial. En concordancia a su color político, fue defensor del RIGI y del blanqueo de capitales. También colaboró para que se apruebe la rescisión del contrato con la UTE que construía el dique El Tambolar. Junto a los tres bloquistas, el massista Franco Aranda y el angaquero Marcelo Mallea, ayudó a construir la mayoría que necesita la gestión para sacar normas en la Cámara.
Es por esta razón que llamó la atención que decidiera pararse cuando había que darle el visto bueno a la designación de Dávila, un hombre de extrema confianza del gobernador Marcelo Orrego. Posteriormente, volvió a la banca para participar en el resto de las votaciones del día.
Los operadores libertarios de San Juan indicaron que el gesto de Patinella fue una respuesta. No vieron con buenos ojos la decisión del gobierno local de no acompañar con sus dos votos el veto presidencial. “No fue para nada casual –que se fuera Patinella”, reforzaron. El “gesto” llegó también después de un pedido de informe presentado por el legislador de la Libertad Avanza para conocer más información sobre la compra de artículos de librería. Dos “respuestas” al hilo.
La relación entre Juntos por el Cambio y los libertarios sanjuaninos atraviesa una etapa de enfriamiento. Así lo definieron desde ambos lados del mostrador. La decisión de Orrego de apoyar el financiamiento extra a las universidades fue comunicada oficialmente: nadie quiso que pasara desapercibida. Terminó con una sucesión de apoyos legislativos a las iniciativas del presidente Milei. Fue una manera de sentar bandera. Y el mileísmo, sin rodeos, decidió mostrar su descontento.