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El 38º festival anual de la Escuela Municipal de Danzas Clásicas e Internacionales colmó el Domo

La oferta de la institución abarca a aspirantes a partir de los tres años de edad con clases de español, clásico y folclore; danzas contemporáneas, a partir de seis años; además de ritmos urbanos, a partir de cinco años.

Los alumnos pagan una cuota societaria que actualmente llega a 1700 pesos mensuales y las pre inscripciones comienzan en el mes de diciembre.

Ana López Freschi, hija de la fundadora de la institución y directora de la Escuela Municipal de Danzas Clásicas e Internacionales desde hace 12 años, se mostró muy feliz por el éxito de esta nueva muestra y expresó su agradecimiento a la constante presencia institucional: “La municipalidad siempre nos acompaña, está en todos los detalles y, gracias a Dios, hoy también van a estar al lado nuestro”.

En el mismo orden, Bárbara Lösch Rosciani, secretaria de Cultura y Turismo de la Municipalidad de Resistencia, refrendó: “Para nosotros y para el Intendente Roy Nikisch es muy importante acompañar a nuestras escuelas municipales en estos años de trayectoria”.

La funcionaria, personal de carrera de la municipalidad en el área, reconoció el valor que tiene el marco que mostraba el Domo del Centenario en la noche de este viernes. “No es fácil de llenar, pero la Escuela de Danzas Internacionales siempre lo llena porque tiene el fuerte acompañamiento de la familia que forma parte de la institución; los profes que trabajan todos los días en la capacitación del arte, de nuestras artes”, subrayó.

En la previa de un evento que contiene a centenares de bailarines, con edades que van desde la niñez hasta los grupos de adultos mayores, se pueden encontrar historias que emocionan; como la Pocho Simonit y Diana Navarro; que comparten 52 años de matrimonio y son pareja de baile desde hace 30.

“Empezamos en Huellas Argentinas y después se jubiló el director nuestro y, bueno, cambiamos de academia; somos mimados, a los adultos nos miman mucho”, cuentan en conjunto, terminando las frases del otro con una sonrisa que encierra complicidad y felicidad.

En otro sector del back stage también estaba Soltemi Romero, adolescente que concurre a clases desde hace 10 años y contó sus sensaciones antes de salir a escena: “Estamos muy nerviosos, estamos esperando mucho este show”.

Del mismo modo, no dudó en animar al municipio a continuar acompañando a esta academia: “Nos gusta mucho bailar y presentarnos”, finalizó.