Un devastador incendio arrasó una vivienda en el barrio 20 de Junio, pero más allá de la pérdida material este hecho desnudó una problemática mucho peor: la lucha de un padre contra su hijo, sumido en una adicción. En un relato dramático, el propietario de la vivienda aseguró que fue su hijo, de 18 años, el responsable de todo lo sucedido al estar involucrado con un grupo de jóvenes con consumo problemático y hechos delictivos en Eldorado.

Coco Brítez pidió lo peor para su hijo (“que lo maten”) cansado de todo lo vivido en estos años donde recorrieron juzgados, centros de desintoxicación y comisarías, sin encontrar una solución. Explicó que ningún tratamiento sirvió, siempre que volvía comenzaba a drogarse y además nunca reconoció ser un adicto.

En relación a este caso, en una entrevista con Canal 9 Norte Misionero el subsecretario de Prevención de Adicciones de la provincia, Roberto Padilla señaló que “estas circunstancias son extremadamente dolorosas” y también es habitual que “quienes enfrentan un consumo problemático no sean conscientes de su enfermedad y tiendan a negar que tienen un problema”.

En cuanto a internación, respondió que a pesar de contar con el Centro Provincial de Prevención y Abordaje en las Adicciones que funciona en Posadas desde enero y otros centros de la provincia “lamentablemente no son suficientes para cubrir la demanda”. De acuerdo a la Ley de Salud Mental, en el proceso de desintoxicación pueden estar en un centro por 30 días.

Con la intención de preparar a la persona para una reinserción social, reconoció que a veces el contexto no favorece que esto suceda y es ahí donde el Estado debe intervenir, analizando cada caso individualmente.

Al no encontrar resultados a corto plazo, señaló que muchas veces se recurre a la judicialización de los casos, lo cual resulta complicado para las familias involucradas, especialmente en situaciones extremas como la ocurrida en Eldorado.

Sucede que la normativa actual establece que la internación es voluntaria, pero al atravesar una situación crítica parece ser la última alternativa posible para las familias. Por ello, mencionó que hay un creciente interés por revisar esta ley, dado que hay casos donde la internación involuntaria es esencial debido a la falta de conciencia sobre la enfermedad por parte del paciente.

“La prevención es importante, pero, a veces, es sumamente necesaria la internación involuntaria”, afirmó Padilla.

En este proceso, el subsecretario comentó que “las recaídas son parte del proceso de recuperación” y algunos expertos sostienen que una persona puede experimentar varias recaídas, hasta 6 o 7, antes de reconocer su enfermedad. Por ello, es fundamental continuar fortaleciendo las redes de apoyo comunitarias.

Fuente: Canal 9 Norte Misionero