En pocas horas, dos efectivos de la Policía de Misiones fueron nuevamente demorados luego que se ampliaran sus problemas legales vinculados a sus funciones en la comisaría Tercera de Posadas, intervenida desde el 11 de octubre por denuncias variadas, por el ejemplo: el robo de pertenencias de detenidos, por esconder expedientes y demás actuaciones y hasta por hurtarle autopartes a un vehículo de un médico de sanidad policial que estacionaba su camioneta en el patio de la secciona de la avenida Uruguay y Ambrosetti.
El jueves fue detenido un suboficial luego que se descubriera que en un cofre de la comisaría, cuya llave tenía en su poder, fueron hallados 119 denuncias y documentos vinculados a expedientes judicializados o que debieron ser notificados a la Justicia de Instrucción de turno.
El mismo policía fue aprehendido el 12 de octubre luego que las autoridades de la intervención asignados detectaran que había “cajoneado” la orden de libertad supeditada para un imputado. Esto ocurrió en agosto, pero el perjudicado continuaba tras las rejas.
Pero aún más problemas enfrentaría este suboficial, porque también se lo investiga la fuga en septiembre de un preso por robo calificado al que le habría facilitado la llave del candado de su celda para que escape. El evadido fue recapturado varias semanas después en Ciudad del Este, Paraguay.
Ayer, durante la mañana, el juez de Instrucción 3, Fernando Luis Verón, ordenó una nueva detención de un efectivo de la Tercera. En este caso se trata de un oficial ayudante que fue buscado en su vivienda por efectivos de Infantería e investigadores de la Dirección Cibercrimen que habrían recogido evidencias y pruebas referidas al robo de la tarjeta de crédito de un suboficial de la Policía Federal Argentina, quien estuvo detenido durante tres días en la convulsionada comisaría por una denuncia de violencia familiar.
Durante su estadía en la Tercera, le habrían robado la tarjeta de crédito y vaciado de fondos con distintas compras que superaron el millón de pesos, principalmente en cargas de combustible (700 mil pesos). Las evidencias colectadas por Cibercrimen lo acorralarían al oficial ayudante como la persona que sustrajo la tarjeta y documentos del resguardo dentro de la comisaría, que se supone corresponde a los jefes de la dependencia de la Unidad Regional I.
Poco minutos después que trascendiera la aprehensión, desde la Jefatura de Policía se notificó la decisión de la Dirección Asuntos Internos de pasar a disponibilidad al uniformado para que la Justicia actúe y tome las decisiones pertinentes.
Vale agregar que, además del allanamiento y detención, se secuestraron varios elementos para ampliar la investigación, principalmente el teléfono celular del oficial de 26 años.
Las últimas medidas tomadas por la Justicia y las autoridades de la fuerza de seguridad de Misiones, se sucedieron tras las publicaciones de PRIMERA EDICIÓN en septiembre y octubre, pero vale remarcar que no fueron los primeros informes respecto a las sospechas e irregularidades en la comisaría Tercera que este medio informó.
En marzo de 2022 se registró la evasión de Leonardo Fabio Martínez (48) que llevaba detenido medio año en esta dependencia por tres robos cometidos en comercios y hogares posadeños, pero con once imputaciones previas por delitos contra la propiedad. Causas en los cinco juzgados de instrucción penal de la Primera Circunscripción Judicial resaltaba el prontuario.
De esta fuga de la Tercera, solo se supo que se produjo en un pabellón donde estaban alojados ocho detenidos y que la ausencia fue descubierta en el relevo de guardia.
Lo curioso, sin responder también, fue que durante la noche del domingo 13 de marzo y madrugada del 14 de marzo de 2022 cuando escapó Martínez, una distribuidora de alimentos de la avenida Rademacher a pocos metros de Rosales, fue “visitada” por un ladrón con sus características.
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