Un militar retirado, de 68 años, mató este sábado por la noche a uno de los tres ladrones que intentaron asaltarlo a mano armada en la localidad bonaerense de Villa Sarmiento, Morón.
Los hechos, que fueron registrados por cámaras de seguridad, revelaron que todo ocurrió este sábado a pocos minutos de las 20, sobre la calle Toscano al 400.
Las imágenes mostraron en primera instancia a un auto Volkswagen Tiguan estacionado sobre una de las veredas. Cerca de las 20, un Chevrolet Meriva se le estacionó a la par y descendieron tres delincuentes que le apuntaron al hombre con armas de fuego.
Uno cubrió la puerta izquierda trasera del Tiguan y el otro se encargó de la delantera, la del conductor. Un tercer delincuente asomó por la puerta del acompañante del Meriva, aunque nunca por completo.
El primero de ellos, vestido con un pantalón negro y una campera de jean, retrocedió y caminó unos pasos hacia el auto que los acercó a la zona del delito. De repente, el segundo de los delincuentes, el que amenazaba más de cera al militar retirado, recibió un disparo a través de la ventanilla, ya que la puerta del auto de la víctima del robo nunca se abrió. Esto desencadenó la huída de los agresores.
Ambos comenzaron a correr y se subieron con dificultad al Meriva, que velozmente comenzó a darse a la fuga, siempre sobre la calle Toscano.
Del Tiguan bajó instantes luego el ex militar, con camisa clara y pantalón oscuro y el arma de fuego en su mano derecha. Se alejó un par de pasos de su vehículo y volvió a disparar dos veces, con la serenidad de quien fue entrenado para situaciones similares.
Minutos más tarde, la policía fue notificada sobre el abandono de un hombre herido en el Hospital Carrillo.
“Su estado era grave, agonizaba con un balazo en el pecho”, precisó una fuente de la investigación que dio a conocer el sitio Primera Plana.
Los voceros lo identificaron como Cristian Marcelo Juárez (35), un hombre con antecedentes penales, quien murió mientras era intervenido quirúrgicamente en ese centro de salud.
El fiscal Claudio Oviedo, de la UFI Nº 5 de Morón, dispuso el secuestro del arma del militar, de 68 años, para peritar, aunque no tomó ninguna medida contra él.