La fundación, surgida en 2014 que pelea contra el maltrato animal y se ocupa de rescatar, recuperar y rehabilitar caballos víctimas de esto, junto con la comunidad UADER, brindarán una cena show el próximo 12 de mayo en el Círculo Católico Obrero de Paraná. Las entradas ya están a la venta.

Redacción El Diario / [email protected]

La ONG Mi Reino Por Un Caballo, junto con la Secretaría de Integración y Cooperación de la Universidad Autónoma de Entre Ríos, con la colaboración de otras áreas de la Comunidad UADER realizarán el próximo viernes 12 de mayo, una cena show a beneficio de la fundación que rescata caballos víctimas de maltrato, con el objetivo de recaudar fondos para los gastos diarios de la misma, tales como alimentación de los caballos, insumos y honorarios veterinarios, alquiler y mantenimiento del predio de recuperación, traslado de los animales, entre otros.

Cena show. El evento a beneficio de esta organización no gubernamental, se llevará adelante el viernes 12 de mayo en el Círculo Catolico Obrero, ubicado en calle Andrés Pazos 347, frente a la Plaza Alberdi. La invitación es a partir de las 21 horas. La misma tendrá un valor de $4800 y contará con un menú apto para vegetarianos, el cual tendrá una entrada que contará de un mousse de ricota y nuez en piel de zanahoria acompañado de calabazas, cebollas asadas y liliáceas a baja temperatura, un plato principal de tallarines con salteado de verduras y sésamo y el postre que serán tartaletas de chocolate y naranjas. Además, la entrada incluye bebida, sea vino, agua saborizada o mineral y un brindis.

Asimismo, habrá shows de artistas musicales que presentarán varios números del estilo folklórico, tango y malambo a lo largo de la noche para que los invitados disfruten, además de sorteos y reconocimientos.

Las entradas se pueden adquirir a través de https://mpago.la/1Q8Ybox, solamente de forma anticipada.

Mi Reino Por Un Caballo. Esta ONG surge en el año 2014, fue legalmente constituida en 2015 y nace con el propósito de luchar contra el maltrato animal, principalmente la tracción a sangre, por lo que se rescata, recupera y rehabilita a caballos que son víctimas de TAS, que están abandonados en la vía pública o que son explotados de alguna manera. Por lo que, arduamente y diariamente, se trabaja en el predio con aquellos ingresos que necesitan de curaciones y terapias para poder recuperarlos y luego, en caso de no tener lesiones crónicas, poder darlos en adopción para que tengan una vida sana, libre y digna. Mientras que, aquellos caballos que sufran lesiones crónicas o requieran de cuidados permanentes, quedan en este lugar a cargo de los voluntarios.

Aquel pequeño grupo que inició esta labor hace algunos años atrás con el rescate de Antares y Hope, los dos primeros caballos, hoy cuenta con el voluntariado de más de 30 personas que sólo por amor y respeto a los animales, todos los días, divididos en dos turnos, se encargan de cuidar, curar, alimentar, limpiar y trabajar para el bienestar de los más de 20 caballos que tienen a resguardo en este momento.

Cabe remarcar que la tracción a sangre sigue existiendo, principalmente fuera de los boulevares, a pesar de que hace años está en vigencia la ordenanza municipal n° 9537 de “erradicación de la tracción a sangre en la ciudad de Paraná”, la cual directamente prohíbe esta práctica. Sumado a ella, tiene validez la ley nacional 14346 de “Malos tratos y actos de crueldad a los animales”, que penaliza determinadas conductas que impliquen un exceso o se configure algún supuesto de maltrato.

Para colaborar. Teniendo en cuenta que este es un problema que, de una u otra manera, involucra a toda la sociedad, desde Mi Reino Por Un Caballo, recordaron que aquellas personas que estén interesadas en sumarse al voluntariado pueden contactarse a través de sus redes sociales, en Facebook Mi Reino Por Un Caballo o en Instagram @mi.reino.por.un.caballo. Los requisitos para ser parte son ser mayor de 20 años, en lo posible tener movilidad propia, asistir al predio de recuperación un día a la semana de forma fija y un domingo al mes, tener flexibilidad para postas o guardias nocturnas cuando sea necesario. A su vez, remarcaron que no es excluyente tener experiencias en caballos o curaciones, ya que también es parte del aprendizaje.

Mientras que, aquellos que quieran colaborar de otra manera, también pueden apadrinar o amadrinar a uno de los caballos que no pueden ser adoptados debido a la gravedad de sus lesiones o problemas crónicos con cuidados permanentes, lo cual se hace a través de una colaboración mínima mensual correspondiente al valor de un fardo al mes, es decir alrededor de $1500. También deberán contactarse por los mismos medios.

Asimismo, se puede ayudar a la fundación, de forma esporádica, sea con dinero o donación de insumos veterinarios, elementos de construcción, fardos, rollos, traslados u otros, que puedan hacer falta en los distintos momentos y de acuerdo a diversas situaciones que surjan.

Mi Reino Por Un Caballo, involucrarse para rescatar a seres inocentes