Fructuoso Álvarez González (63), el condenado por la “Masacre de Flores”, murió este domingo por la mañana tras “múltiples paros cardiorrespiratorios”. Así lo confirmaron a Infobae fuentes de la investigación y explicaron que el homicida estaba internado en el Hospital Zonal General de Agudos Dr. Alberto Antranik Eurnekian del Penal de Ezeiza desde el 4 de abril pasado. Falleció como consecuencia de un “shock séptico a foco infeccioso peri implante de cadera derecha”. O sea, una infección generalizada.
Luego de confirmarse la noticia, Matías Bagnato, el único sobreviviente de la masacre en la que murieron cuatro integrantes de su familia (sus padres José y Alicia, sus hermanos Fernando, de 14 años, y Alejandro, de 9) y un amigo que se había quedado a dormir (Nicolás, de 11), se expresó en sus redes sociales. “Hoy sí por fin puedo decir se terminó. Mami, Pá, Fer, Ale, Nico: descansen en Paz. Los amo con todo mi corazón”, escribió. Luego, avisó que este lunes 1° de mayo a las 11 dará una conferencia en Bartolomé Mitre 1.906, en el edificio de la Asociación Argentina de Aeronavengantes.
A mediados de marzo, la Justicia le había negado a Álvarez González la libertad condicional, una solicitud de su abogada, Patricia Viviana Croitoru,debido a que el condenado se había roto la cadera en diciembre de 2022 pasado y desde esa fecha estaba “postrado” sin posibilidad de mantenerse en pie solo.
Tras la fractura, en el mes de enero de 2023, al homicida se le colocó una prótesis que derivó en una sepsis, es decir, una infección que, en caso de no ser diagnosticada y tratada de forma temprana, “puede ocasionar un daño irreversible a los tejidos, choque séptico, insuficiencia orgánica múltiple y poner en riesgo la vida”, según señala la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Fructuoso Álvarez González fue condenado a prisión perpetua en noviembre de 1995 por el Tribunal Oral en lo Criminal N° 12. Nueve años más tarde, en marzo de 2004, consiguió ser extraditado a España para terminar de cumplir allí su condena, ya que tenía la ciudadanía de dicho país.
El 22 de noviembre de 2008, el autor de la “Masacre de Flores” fue liberado en España, pero en 2011 volvió a ser recapturado en Argentina,luego de amenazar de muerte a Matías Bagnatoy a su abuela. Desde entonces, permanecía preso en el Complejo Penitenciario Federal N°1 en la localidad bonaerense de Ezeiza.
En marzo pasado, tras la fractura de cadera de Álvarez González, su abogada solicitó a la Justicia la prisión domiciliaria, pero la titular subrogante del Juzgado Nacional de Ejecución Penal N°1, María Jimena Monsalve, la desestimó por considerar “de manera unánime” que no estaba en condiciones de ser excarcelado.