Alertan por el consumo del medicamento Ozempic para bajar de peso; estos son los daños graves a la salud

Ozempic se usa en pacientes con diabetes. REUTERS/Tom Little

Ozempic es un medicamento que se receta en algunos casos, para pacientes con diabetes tipo 2, y aunque no es para perder peso, algunas personas lo ingieren para justamente perder kilos de manera veloz.

Sin embargo, debido a que en otros países como Estados Unidos se ha popularizado su consumo en personas con obesidad, ya que se ha viralizado la idea de que al consumirlo las personas suelen bajar de peso rápidamente.

Y es que en redes sociales se han replicado videos de personas que aseguran que presuntamente bajaron hasta “15 kilos en un mes, gracias a Ozempic”.

Incluso, artistas o diversas personalidades como el presidente Joe Biden o el director de Tesla, Elon Musk, han lanzado la propuesta de incluir este fármaco en algunas clínicas u hospitales para reducir la obesidad en EEUU.

Sin embargo, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) alertó que su consumo en exceso y sin supervisión médica puede provocar fuertes daños a la salud.

Se trata de un medicamento inyectable que se utiliza como tratamiento para adultos mayores con diabetes tipo 2. También se ha detectado con nombres como: Rybelsus, Semaglix y Saxenda.

Alertan sobre su consumo en exceso. (Montaje Infobae España con imagen de George Frey/REUTERS)

De acuerdo con la dependencia, su consumo sin supervisión médica puede ocasionar efectos adversos como náuseas, vómitos y diarrea, así como daño renal, estreñimiento, mareos, taquicardia leve, infecciones, dolor de cabeza, dispepsia, irritación e inflamación de la piel en el sitio de inyección.

Novo Nordisk, la compañía que fabrica Ozempic confirmó que no es un fármaco para perder peso y puede causar afectaciones en la tiroides, cáncer o pancreatitis.

Incluso, se han detectado casos de personas que suelen ser más agresivas o adquieren conductas suicidas al tomar el medicamento.

El año pasado, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) revisó estos reportes y concluyó que no hay información suficiente para respaldar una relación causal entre dichos fármacos y pensamientos o acciones suicidas y autolesivas.

Y es que a pesar de que su consumo no ha sido descartado para bajar de peso, se recomienda no ingerir el fármaco en exceso y sin supervisión médica.

Ante ello, la autoridad sanitaria detectó que, recientemente, en redes sociales y plataformas de entretenimiento se promueve el uso de estos productos para la pérdida de peso rápida, lo que puede causar graves daños a la salud o incluso la muerte.