En unos pocos días, el próximo miércoles 3 de mayo, llega a Paramount+ el estreno de la docuserie Thalía’s Mixtape: el soundtrack de mi vida, un trabajo audiovisual que realizó la estrella mexicana Thalía en referencia a las canciones de rock en español que fueron fundamentales en su juventud y que la marcaron a fuego a lo largo de su vida, pese a que su carrera musical se inclinó al pop latino.
De alguna manera, se trata de un revisionismo juvenil propio, en el cual ella plantea, desde las entrevistas y versiones musicales, un legado de una época que vivió “para que las nuevas generaciones conozcan”, e incluso con la presencia de algunos artistas jovencitos y taquilleros, además de los grandes íconos de los cuales ella fue fanática en su pubertad.
Entre los invitados aparecen jóvenes talentos como el guatemalteco Ben Carrillo, la mexicana Kenia Os y su compatriota León Leiden, entre otras influencias musicales actuales.
Y también Roco Pachukote de Maldita Vecindad (versionan Pachuco), David Summers de Hombres G (versionan Sufre Mamón) y Andrea Echeverri de Aterciopelados (versionan Florecita Rockera). Además, aparecen versiones de canciones de Los Enanitos Verdes (La muralla) y la Mosca Tse Tse (Para no verte más), entre otros temas que sonaron tanto en radios como en discotecas de toda Latinoamérica.
Cabe destacar que en paralelo a la serie, la estrella de la música latina acaba de editar su décimo noveno álbum, que incluye once versiones a modo de tributo de canciones de los ochenta y noventa en material físico y en formato digital.
Un encuentro virtual
De este lado de la pantalla de la laptop, el cronista; del otro, la estrella protagonista de la serie, en los Estados Unidos. Thalía se encuentra sentada delante de los afiches promocionales de la serie. Luce espléndida y con la sonrisa amplia que desde siempre la caracteriza. Amable y predispuesta, se brinda para una corta, pero atractiva entrevista con Clarín.
“Yo tenía el póster de Soda Stereo en la pared, ellos con sus cabellos batidos y semiparados, clásicos cabellos al estilo punk, tenía en mis cuadernos a Hombres G, obviamente a Maldita Vecindad, tenía a Pachuco allí pegado también. O sea, todo lo que tuve la fortuna de vivir en este documental – serie musical, todo eso era lo que adornaba las paredes de mi habitación».
Mis cuadernos me acompañaban a todos lados, estas imágenes iban conmigo, porque era el hecho de que se valía ser diferente”, revela de manera expresiva. Casi sin respiro alguno, Thalía continúa hablando y detalla aspectos de los años ochenta que, según ella, se trata de recuerdos “imposible pasar por alto”.
“Por aquella época sí se podía alzar la voz y decir algo que tal vez fuera en contra de los estatutos de la sociedad back then de ese momento, había que romper las reglas y se lo lograba”, señala la protagonista.