Las escuelas tienen prioridad por el rol pedagógico del edificio. Pero también hay actividades para grandes y toda la familia. “Es un lugar donde se habla del origen y la evolución del universo”, segura Estefanía Coluccio Leskow, doctora en Física de la UBA y gerenta operativa del establecimiento.
El Planetario Galileo Galilei tiene como objetivo brindar contenidos científicamente sólidos sobre la Astronomía y el Cosmos a toda la sociedad. (Foto: planetario.buenosaires.gob.ar)
Durante el año lectivo, todos los días 1.250 chicos de escuelas de la Ciudad de Buenos Aires y del interior, públicas y privadas, visitan el Planetario Galileo Galilei para asistir a las funciones especialmente diseñadas para cada edad, con elementos interactivos.
Previo a la visita, el alumnado recibe en la escuela una orientación donde se les explica lo que van a vivir. Durante las funciones se emocionan y viven intensamente una experiencia única. También tienen juegos y los orientadores los van llevando por el museo y las distintas alternativas que se ofrecen. El fin: obtener contenidos científicamente sólidos sobre la astronomía y el cosmos.
Leé también: La NASA dio a conocer la foto a color más profunda y nítida del universo
“Cuando los chicos están adentro de la sala y ven que se les aparecen las constelaciones, se les viene la Luna encima… los gritos de emoción y todas las demostraciones son muy impresionantes. Y cuando se van… hay sonrisas”, se emociona Estefanía Coluccio Leskow, doctora en Física de la UBA y Gerenta Operativa del Planetario Galileo Galilei.
El rol pedagógico del edificio emplazado en los Bosques de Palermo, vecino a El Rosedal y al monumento a Justo José de Urquiza, es central. Los alumnos son la prioridad y ocupan la mayor atención.
Leé también: Un equipo de científicos busca descifrar el origen del universo con un telescopio instalado en Salta
Según Coluccio Leskow, el Planetario es parte de la educación de los estudiantes de las escuelas primarias y secundarias. “Tenemos cinco funciones por día para 250 alumnos durante la época escolar. De lunes a viernes pasan más de mil chicos por día, que vienen a presenciar y a aprender de una manera muy interactiva. No es que vienen, ven una función y se van. El Planetario les da contenido previo a esa función para que vayan trabajando en las aulas lo que van a experimentar. Y hay toda una interacción de nuestras relatoras y relatores con ellos mientras se está dando cada función”, explicó.
En los momentos en los que en el Planetario no están focalizados en los alumnos, las autoridades se ponen a disposición también de los grandes y las familias que pueden ir a disfrutar de contenidos de divulgación, tanto en las funciones del Domo, el lugar por excelencia del edificio, como en el resto de las instalaciones.
“Un Planetario es un lugar donde se divulga contenido astronómico y cosmológico: el origen y la evolución del universo”, define Estefanía y suma: “Si uno quisiera divulgar temas de biología, bueno, tiene acceso a una planta, a un animal, incluso a una célula que tiene que mirar con un microscopio. Nosotros para ver los astros tenemos telescopios, pero hay muchos astros a los que no tenemos acceso ni siquiera con telescopios. Para eso tenemos otras herramientas. Lo hermoso de un Planetario es que nos acerca el universo de una manera muy emotiva”.
Las funciones en el Domo “son espectáculos astronómicos, divulgativos y educativos, que tienen contenidos súper sólidos de astronomía”, amplía Estefanía.
Leé también: Fin de semana largo: cierran el paso Cristo Redentor con Chile por las malas condiciones climáticas
Además, en el Planetario hay visitas guiadas. El edificio tiene su museo y una plaza astronómica. “Tenemos meteoritos y algo súper preciado en nuestro museo que son las rocas lunares. En las misiones Apollo se recogieron piedras y Estados Unidos repartió en varios países pedacitos de esas rocas. Y uno lo piensa… y tiene acá pedacitos de la Luna”, dice llena de orgullo Coluccio Leskow, con una amplia sonrisa.
El menú de actividades sigue con conferencias de expertos, cursos de “astronomía general” y “descripción del cielo”, talleres para niños, niñas y adolescentes, y un sinnúmero de actividades culturales a lo largo del año, que no necesariamente se repiten. “Hay mucho arte conectado con la ciencia en el Planetario. A veces no, son meramente actividades culturales. El Planetario es un lugar de experimentación”, explica su titular.
Tratándose de la observación de los astros, uno podría pensar que el Planetario debería funcionar de noche. Error. “Los fines de semana, cuando está despejado, hacemos sesiones nocturnas de observación con telescopios”, cuenta colui. “Sacamos cuatro o cinco telescopios afuera y la gente puede venir a observar los astros, con un cupo de 250 personas. Dependiendo de la época del año, porque no siempre podemos ver los mismos astros, uno puede ver a Venus, a La Luna, a Júpiter, a Saturno. Pero además de las funciones, los fines de semana durante el día tenemos los telescopios especiales para ver al Sol. Uno puede pensar ¿El Sol? ¿Qué puedo ver del Sol? Bueno, hay momentos en los que uno puede observar las famosas manchas solares. Y esa es otra actividad del Planetario”, amplía.
La accesibilidad de las instalaciones está especialmente cuidada. Estefanía lo remarca: “A este Planetario puede venir gente sorda, tenemos funciones especiales para gente con esa condición, hay un montón de actividades para gente ciega, hay funciones que llamamos “distendidas”, para chicos con espectro autista, y si viene alguien con una discapacidad motriz tenemos rampas para que puedan llegar a cualquier piso del Planetario, ya sea el museo o a las funciones en el Domo”.
Leé también: Detrás del plástico que inunda las costas de Chubut hay una industria pesquera que no controla sus desechos
El Planetario está abierto de martes a domingo. Los lunes permanece cerrado al público. Los horarios y las funciones dependen de la época del año. En vacaciones hay cuatro funciones en el Domo para el público en general, de martes a viernes, entre las 13 y las 18.30. Los sábados y domingos, las funciones se extienden a seis, la primera arranca a las 11.30 y la última a las 20.
Durante el año lectivo, de martes a viernes, la prioridad la tienen las escuelas: están las cinco funciones para las escuelas, a las que se les suman otras dos para público en general. Y durante el fin de semana hay siete funciones para el público en general.
El punto más álgido de su actividad ocurre durante las vacaciones de invierno. Para ellos son tres semanas: a las dos que tienen los alumnos de la Ciudad se suma una más, porque en las provincias empiezan y terminan una semana antes. Son siete funciones todos los días y la demanda de entradas registra los picos más altos del año.
El Planetario fue fundado en 1967. “El año pasado cumplió 55 años. El arquitecto que lo construyó fue Enrique Jan, una persona que trabajaba en la Ciudad de Buenos Aires a la que le propusieron diseñar un planetario y se le ocurrió esta belleza que todos pueden visitar de martes a domingos”, dice a modo de cierre Estefanía.
Página web: https://planetario.buenosaires.gob.ar/
Redes sociales: Instagram: @planetarioba Twitter: @planetarioba Tik Tok: @planetarioba
Las entradas para el Planetario se compran online en la página oficial, y se pueden comprar presencialmente en la boletería, solamente de martes a viernes. Los menores de seis años, jubilados y personas con discapacidad no pagan entrada.