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Jazmín Badía, la sobrina de Juan Alberto y el cerebro detrás de Paren la Mano, el fenómeno radial del momento

En una charla a corazón abierto con TN Show, la productora habló de todo. El legado de su tío, la pasión por lo que hace, cómo es trabajar con Luquitas Rodríguez, Germán Beder y Alfredo Montes de Oca y sus planes a futuro.

Jazmín Badía es productora y sobrina de Juan Alberto. (Foto: gentileza Jazmín Badía)

Jazmín Badía es productora y sobrina de Juan Alberto. (Foto: gentileza Jazmín Badía)

El apellido Badía es toda una institución en el mundo de la radiofonía argentina. Juan Alberto Badía fue uno de los conductores más importantes de la historia siguiendo el camino de su padre, Juan Ramón, maestro y profesor de locutores. Hoy, el legado familiar sigue latente en nuestra radio con una generación nueva.

Jazmín Badía es la sobrina del conductor de Badía y compañía. La joven de 35 años es la productora del programa Paren la mano (Vorterix radio FM 92.1), el ciclo radial conducido por Luquitas Rodríguez que es un fenómeno viral. Ella se encarga de ordenar lo que sucede en el aire, mientras el humorista, secundado por los columnistas Germán Beder y Alfredo Montes de Oca, hacen su “magia”.

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Risueña y agradable, la mente detrás de uno de los programas más escuchados en la franja horaria de las 19 horas-promedia 13 mil personas que siguen en directo las transmisiones en YouTube y entre 3.500 y 4.500 en Twitch- se dispone a hablar de todo en un café del barrio porteño de Colegiales.

-¿Cómo es producir uno de los programas más escuchados de la FM?

-La verdad es muy fácil… Al contrario de lo que se debe pensar, es bastante simple. Los pibes (Rodríguez, Beder y Montes de Oca) son lo más. Yo vengo laburando en medios convencionales y es en general complejo, o hay algunas rispideces. Y eso no pasa acá. Yo la paso rebien. El otro día me pasó que no pudo venir un invitado y los pibes se cag… de risa, hacen un contenido con eso. Y creo que en otro momento los personajes se lo hubiesen tomado de otra forma.

Jazmín Badía es productora del programa radial Paren la mano (Foto: Instagram/jazminbadia)

Jazmín Badía es productora del programa radial Paren la mano (Foto: Instagram/jazminbadia)

-¿Sentís presión al estar en un programa con ese alcance?

-Sí, pero la presión es propia, no es que alguien me la está generando, porque me parece que quiero que sea el mejor programa y porque quiero que esté producido de la mejor manera. Quiero que todo sea excelente, pero no porque alguien me lo exija.

-¿Y cómo manejas eso?

-Terapia una vez cada quince días y lo charlo (risas).

-¿Conocías a alguno de los chicos?

-No, de hecho un poco los estudié, porque no los conocía. Me llamó el hermano de un amigo que labura en Vorterix y me dijo “Che, están buscando productora para Luquitas”, y le dije que no sabía quién era. Sí conocía Rodríguez-Galati (la dupla humorística que el conductor de PLM hace con Roberto Galati), pero no era consumidora digamos. Y me dijo que me fijara. Justo en ese momento estaba en Metro (FM 95.1) los fines de semana y tenía otro trabajo que además me gustaba y estaba buenísimo. Al final le dije a mi amigo que me dejara pensarlo. Entonces hablé con Maxi, que creo que es como un socio de Mario (Pergolini, dueño de Vorterix) y me empezó a contar cómo era la idea y me interesó la propuesta. Me dijo “Buscalo a Luquitas y hablamos la semana que viene”. Lo busqué, me ca… de risa, lo hablé con mis amigas y al final lo re conocía. Y dije que sí. Renuncié a mis otros trabajos y vine para acá.

El equipo completo de Paren la mano (Foto: Instagram/luquitarodrigue)

El equipo completo de Paren la mano (Foto: Instagram/luquitarodrigue)

-¿Cómo fue cuando lo conociste a Luquitas? ¿Cómo fue la primera reunión?

-Creo que en la primera reunión estábamos todos, pero fue por Zoom, y después Luquitas se fue de viaje, entonces terminé coordinando el programa con Alfredo y con Germán por Zoom también, con Germán diciendo “Mmm, me parece que esto va a ir muy para abajo” y Alfre diciéndome “Vos quedate tranquila, va a salir todo bien”, y yo pensando “Qué miedo, ¿dónde me metí?”, pero salió todo bien.

-A priori, al escuchar el programa parece que en verdad uno no sabe cuál es el contenido de cada bloque, es medio un “vamos viendo”, ¿cómo lo armás?

-Bueno, sos muy perceptivo (risas). Creo que el año pasado estaba un poquito más armado y este año los chicos tomaron más envión en creer en sí mismos y darle para adelante con lo que tienen, que es muy copado.

-Es como una improvisación al aire…

-Completamente. Desde mi rol lo que trato de hacer, y lo hablé un montón de veces con los chicos, es poder “alimentarlos” desde este lado del vidrio. Con un invitado, con que se me ocurrió sacarles un tema… pero la realidad es que la magia que sucede en ese estudio la ponen ellos y yo trato de acompañar. El otro día vino Mario, fue espectacular. Me dijo “Che, se me ocurrió tal idea, entro al estudio con unas corbatas. Tenete tal cosa… qué te parece”. Lo agarré, lo miré y le dije “Mario, entrá, hacé tu magia y yo te sigo”. Creo que hay productores más periodísticos, más ordenados y como con cierta estructura, y lo que entendí gracias a ellos que me gustó es que yo acompaño. Resuelvo en el momento lo que creo que tengo que resolver desde producción. He tenido otros programas en los que la previa de producción era larguísima y estaba buenísimo también, pero son son diferentes programas y hay que acomodarse a lo que esté enfrente.

El legado familiar

-Venís de una familia radiofónica ¿recordás alguna charla con tu tío y tu tía en la que les comentabas que querías dedicarte a esto?

-Yo trabajé con mi tío, por lo tanto he tenido charlas. Con mi tía (Marisa Badía) tuve más charlas del estilo de “tuve este problema, ¿cómo lo resuelvo?” y con mi tío a otro nivel. Me acuerdo que en un momento trabajé en Pol-Ka haciendo la primera temporada de Violetta (2012) y eran 14 horas de laburo o 12, no me acuerdo, pero después de eso me iba a estudiar, entonces yo estaba fuera de mi casa un montón de horas, y no la pasaba muy bien, y renuncié.

Me fui a laburar al BAFICI (Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente), algo más tranqui. Cuando terminó el BAFICI me quedé sin laburo y sin saber qué hacer. Lo llamé a mi tío, le conté y él me dijo “Andá por acá”. Y un poco me faltan esos consejos de él, que estaban buenos. He tenido esas charlas, he trabajado con él, era muy exigente. Cuando él tenía su radio en su casa, viste que en la radio tengo la camarita que enfoca el control, bueno, cuando el tenía la radio en su casa había como una camarita muy parecida a esa y yo lo que hacía era dibujar en un IPad que tenía a mi tío ahí y ponía como en la pantalla la cámara. Y es medio parecido a lo que hago hoy, es rezarpado eso.

Jazmín Badía trabajó junto a su tío, Juan Alberto (Foto: gentileza Jazmín Badía)

Jazmín Badía trabajó junto a su tío, Juan Alberto (Foto: gentileza Jazmín Badía)

-¿Con la radio fue amor a primera vista?

-Sí. El primer año que hice en TEA tenía una profesora que se llama Mili que me dijo que su primo tenía un programa de radio que se llamaba Eternamente Beatles y me comentó que estaba buscando una productora. Era los sábados a la noche… nunca fui de salir mucho y pense “no tengo nada mejor qué hacer”. Más que por mi familia nunca había ido a una radio por motus propio a trabajar y me flashó. Llegué y el chabón- Martín Aragón se llama- fue redivino. Me pidió el mail para que me pasara la rutina y explicarme cómo era la radio. Cuando le respondí “j_badia@…” me preguntó qué relación tenía con Juan Alberto y se sorprendió cuando le conté que era la sobrina. Incluso fui como más feliz trabajando ahí porque el vínculo fue por mí y no por mi apellido.

-¿Por qué elegiste la producción y no la conducción?

-Me parece mucha responsabilidad, la verdad. Es un apellido que me genera mucha responsabilidad. Mi abuelo era locutor, mi hermana es locutora, no sé si hace falta más gente al aire (risas) y tampoco sé si me interesa. A mí me gusta producir, me gusta la parte de organización. Más allá que después me divierte estar al aire, pero estar ahí, en la producción, es clave para mí. Me da seguridad, me gusta.

-¿Con la exposición cómo te llevas? ¿Te pidieron fotos en la calle?

-Alguno que otro. Está buenísimo, pero no es exposición. No es algo a lo que apunte. Si se da, se da, pero no voy a por ello. Me pasaba con mi tío todo el tiempo… íbamos a comer y venía alguien a pedir una foto y es algo que he visto en mi familia y mi tío lo hacía con mucha felicidad. Me parece que lo más lindo que tiene esto es que uno cuando hace un laburo random quizás no tiene la suerte de que mucha gente lo vea y acá tenés la suerte que un montón de gente te está viendo, para bien y para mal. Pero lo bueno de eso son dos cosas: primero que te está viendo mucha gente, y segundo, si te mandás una cag… al otro día la podés resarcir de alguna forma. Además de que me da orgullo es un honor para mí, yo lo vivo así. Hay un montón de gente que me escribe preguntándome dónde estudié, qué estudié, cómo hice tal cosa, como llegué. Para mí es un honor.

-¿Tu tío te llegó a ver como productora?

-Sí, pero eran los primeros años. Me mandaba muchas cag…

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-¿Y cómo lo tomaba él? ¿Estaba orgulloso?

-Re. Hay un video de cuando yo era chiquita en el que él me tocaba la cabeza y me decía algo así como “Vos sos la más chiquita de la familia. Dale, vos podés” ¡Ay! me emociona un poco. Un 25 de mayo, que hizo el inicio de su radio cuando ya estaba medio mal, fue la primera vez que produje. Era la asistente de producción de mi tía y había que llamar a Cacho Fontana y mi tía me pasa su contacto y lo llamé desde mi teléfono. No me contestó. Entonces le robé el teléfono a mi tío, lo llamé desde su teléfono y ahí atendió. Como que me hizo click la neurona y pude hacerlo bien. Ahí mi tía me dijo “Es eso, lo que acabás de hacer, es por ahí” y mi tío también me felicitó y fue como “wow”.

Jazmín Badía junto a su tío, Juan Alberto (Foto: gentileza Jazmín Badía)

Jazmín Badía junto a su tío, Juan Alberto (Foto: gentileza Jazmín Badía)

-Elizabeth Vernaci en una entrevista había dicho que te faltaba la picardía que te dan los años, ¿sentís que ya la adquiriste?

-Puede ser, no sé. Creo que ese programa (Black & Toc) y ella me enseñaron un montón y hoy creo que estoy un poco más plantada. Me parece que haría un montón de cosas diferentes.

-¿Qué recuerdos te llevás del programa con ella? ¿Sentís que podrías haberlo hecho mejor?

-Fue una de mis primeras experiencias, obvio que hubiese hecho mil cosas de otra manera. Yo creo que todos los programas que hice me dejaron un aprendizaje. De esta charla yo me voy a llevar algo. Me parece que más o menos, siempre aprendés algo, y con La Negra estuve nueve meses, diez, aprendiendo de la mina que más sabe de radio.

-Además de la radio, ¿qué otra cosa te apasiona?

-Muchas cosas. Por suerte, de grande y con mucha terapia entendí que está buenísimo que no te apasione solamente una cosa y diversificar la energía. Estoy estudiando coreano porque me gusta mucho, me divierte un montón. Me apasiona escuchar música y pensar ideas todo el tiempo. Muchas veces me cuelgo y me cuesta dormir pensando cómo podría hacer tal o cual cosa. Pensar ideas y nuevas maneras de contar cosas, nuevas maneras de generar contenido en algún lado para algo en particular. Creo que no quedarme quieta es lo que me apasiona.

Jazmín Badía en Vorterix Radio (Foto: Instagram/jazminbadia)

Jazmín Badía en Vorterix Radio (Foto: Instagram/jazminbadia)

-¿De dónde surgió el interés por el coreano?

-Cuando fue la pandemia miré la película Parasite y me gustó mucho y empecé a mirar un montón de series coreanas y hubo una en particular, que se llama Aterrizaje de emergencia en tu corazón que me acompañó durante la mudanza. Yo antes vivía en un departamento y ahora vivo en otro, y haciendo esa mudanza me acuerdo que la puse doblada en español, como que la tenía de fondo, como una radio, y me encantó. Tienen como una manera muy particular de contar historias, medio extensa pero copada, y me empezó a encantar la cultura.

-Por lo que te pude conocer en esta charla te considero una persona sensible, ¿vos cómo te definirías?

-Si me defino me limito (risas). No tengo ni idea, soy recontramegasensible, eso seguro.

-¿Tenés planes a futuro, asignaturas pendientes?

-Me quiero ir a Corea, me quiero ir de vacaciones también, hace un montón que no me voy de vacaciones. Hace muchos años que no me voy de vacaciones y tengo ganas de irme. Nuestro laburo es medio como que en enero y febrero ves que onda. También tengo ganas de hacer un proyecto vinculado al proceso de selección de carreras, de una profesión, de un oficio. Algún tipo de contenido pero no sé bien para qu´w plataforma. Siempre fue muy complejo, al menos para mí fue megacomplejo. Esas charlas que tenía con mi tío eran un poco eso también. Yo no tenía definido que iba a trabajar de esto, para nada. De hecho cuando salí del colegio estudié trabajo social, y todavía tengo ganas. Hace poco tuve una reunión de laburo con una empresa y era para hacer la comunicación en una fundación. Quiero poder ayudar a las personas.