Puede comenzar como una respuesta anormal de los vasos sanguíneos a las bajas temperaturas. El riesgo de tenerla es mayor en mujeres y personas con bajo peso.
18 de julio 2024, 09:41hs
Leé también: Las seis recomendaciones necesarias para protegerse del frío en medio de la ola polar
Son un problema muy frecuente en invierno por el frío. Es importante saber cómo actuar para disminuir el dolor y la irritación que produce este problema cutáneo y circulatorio. La afección no suele provocar lesiones permanentes.
Síntomas de los sabañones
Los síntomas suelen aparecer entre 12 y 24 horas después de la exposición al frío. Es muy importante buscar atención médica para los sabañones si los síntomas son persistentes, si desaparecen y luego reaparecen o si creés que podrías tener una infección.
Picazón.Ampollas o heridas.Hinchazón.Dolor o escozor.Cambios en el color de la piel.
Tratamiento y prevención
Es importante saber que esta afección está fuertemente relacionada con los meses de invierno y con la llegada del frío es muy habitual su aparición. Los sabañones son frecuentes en esta época del año ya que son un tipo de lesión transitoria provocada por una vasoconstricción a causa del frío y una mala circulación.
Leé también: Las tres razones por las que es conveniente hacer ejercicio en invierno al aire libre a pesar del frío intenso
El tratamiento más efectivo son las medidas físicas:
Al presentar síntomas, limpiar, secar y proteger el área afectada es clave para evitar empeorar las lesiones.Las lesiones infectadas o ulceradas requerirán tratamiento adecuado.Evitá fumar, ya que empeora la reacción de los vasos sanguíneos al frío y reduce la capacidad de dilatación por el frío.Mantené la piel seca ya que reduce la pérdida de calor.Vestirse con guantes, bufandas, medias gruesas y usar calefacción en el frío previenen problemas porque evitan la exposición al frío.Evitá el sedentarismo, favorecé la circulación de los miembros inferiores a través del movimiento.Es importante proteger los pies de los ambientes fríos y húmedos.Mantener una dieta equilibrada.Utilizar un calzado con suela aislante y que esté confeccionado con tejidos transpirables que ayuden a mantener los pies secos y calientes.Aplicar crema hidratante y reparadora de la piel de forma habitual ayuda a que los pies estén preparados y evita la aparición de sabañones.