«Te amo amor, siempre vas a ser mi bebé«, escribió Johana Montoya (30) y posteó una foto de su hijo. El buzo negro, el escudo amarillo, la sonrisa enorme. Bastian Escalante Montoya tenía 10 años y el miércoles salía de la escuelita de fútbol de la Sociedad de Fomento Barrio de la Carne, en Wilde, donde entrenaba hacía dos años. Lo mataron de un disparo cuando un policía de civil se defendió a los tiros de un robo.
«Yo enterré a mi hijo y hoy me levanto más fuerte: voy a ir contra todos«, sentenció Johana, que habló con Clarín. El nene murió el jueves, alrededor de las 7, después de haber sido operado de urgencia.
«Justicia para mí es que se esclarezca todo, que los responsables estén presos. Quiero saber por qué llegó la Policía y quiso entorpecer la investigación llevándose las cosas, quiero saber qué clase de profesional habilita a un policía a usar un arma de esa manera, cómo puede ser que este policía haya visto a los chorros, y no a mí, que estaba con mi hijo, para seguir disparando de esa forma», cuestionó la mujer.
Johana, que trabaja como empleada de limpieza en un hotel y que este jueves a las 19 participará de una marcha pidiendo justicia, agregó: «Mi fuerza son mis hijas (de 13 y 15 años) y pedir justicia por mi hijo, que no quede todo en la nada. No puede ser que alguien ande así a los disparos por la calle, tampoco que haya tanta inseguridad».
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La secuencia completa del camino que hicieron Bastián y su mamá intentando escapar del tiroteo.
«¿Cómo hago para llevar a mi otra hija al club? ¿Cómo hacemos para volver a ir al colegio después de lo que pasó?», se pregunta la mujer, que el viernes enterró a su hijo en el cementerio de Avellaneda después de una caravana que pasó por dos clubes del barrio y por su casa, a cinco cuadras del lugar del crimen.
Johana llegó a ver al policía sacar su arma reglamentaria cuando lo cruzaron para robarle. Bastian iba en su bicicleta, como todos los días, y ella caminaba a su lado. Cuando vio la escena, reconstruye, se dio vuelta y empezó a correr en dirección contraria.
Lo que todavía es una incógnita es si los cuatro asaltantes que cruzaron a Juan Alberto García Tonzo (30) estaban armados, si realmente hubo un enfrentamiento como declaró o si dispararon contra él.
Según pudo saber Clarín, se recolectaron en la escena alrededor de 10 proyectiles pero todavía no está claro si son todas de la pistola de García Tonzo, que cumplía funciones en el Comando de Patrullas de Avellaneda aunque estaba de civil y en franco de servicio, o si también dispararon los ladrones.
La convocatoria a una nueva marcha por Bastian.El agente está detenido y acusado de homicidio con arma de fuego en contexto de exceso en la legítima defensa.
Ese miércoles, alrededor de las 20, esperaba a su hijastro en la puerta de la Escuela Técnica N° 3, a metros de la Sociedad de Fomento Barrio de la Carne.
Estaba en su moto Bajaj Rouser NS200 cuando cuatro jóvenes lo cruzaron para asaltarlo. Cuando exhibió su arma, Johana quiso proteger a su hijo Bastian y empezó a correr en sentido contrario. Las balas alcanzaron al nene, quien recibió un impacto que ingresó por el hombro y salió por la cervical.
La marcha en Wilde tras el crimen de Bastian. Foto Martín Bonetto.En ese momento, un auto que circunstancialmente pasaba por ahí, chocó con una de las dos motos. Los dos ladrones cayeron e intentaron escapar corriendo, pero los atraparon. Uno tiene 18 años y el otro 16. Se negaron a declarar y tienen antecedentes por robo.
«Yo solamente vi cuando el policía sacó el arma y empezaron los disparos, no llegué a ver a los ladrones. Nosotros salíamos del club, estábamos yendo a mi casa, ellos se bajaron de la moto para robarle al policía, vi que el policía sacó el arma y empezamos a escuchar los disparos. Yo denuncié al policía por su accionar porque no entiendo qué clase de profesional dispara de esa manera, no puede ser que haya visto a los chorros y no a mí», insistió Johana.
«Me vio, me habrá visto, no le importó que fuera con mi hijo. Entonces se tiene que pudrir en la cárcel«, sentenció la mujer.
Bastian Escalante era el hijo menor de Johana. Tenía dos hermanas de 13 y 15 años.Advirtió que su «fuerza» son sus hijas y «pedir justicia» por Bastian para «que no quede todo en la nada» y completó: «No puede ser que alguien ande a los disparos por la calle ni que haya tanta inseguridad».
En 2023 Johana ya había sido asaltada cerca de su casa y mientras estaba con su hija. Afirmó que la inseguridad «es terrible» y pidió que lo que pasó con su hijo «sirva para que los policías estén donde tienen que estar, haciendo lo que hay que hacer, porque tienen que estar en la calle, no calentitos adentro de la comisaría o del patrullero porque hace frío«.
La convocatoria de la familia para una nueva manifestación.La investigación está en manos del fiscal Juan Ignacio Colazo, de la Fiscalía N° 2 del Fuero de Responsabilidad Penal juvenil de Lomas de Zamora, que esta semana tendrá la audiencia de prisión preventiva para el adolescente de 16 años.
El policía presentó un abogado particular, quien realizó el pedido de excarcelación pero que todavía no ha tenido respuesta.
Marcha a las 19
Este martes la familia convocó a una manifestación en la puerta de la Sociedad de Fomento Barrio de la Carne, en Rondeau al 1900, en Wilde, a las 19.
Será el mismo día que la Policía Federal empezará con las pericias balísticas para determinar quién disparó y de qué arma salió la bala que mató al nene de 10 años.
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Los amigos del chico asesinado encabezaron la movilización, que comenzó en la puerta del club en el que jugaba a la pelota y terminó con velas en el lugar de su muerte.
En tanto, hay otros dos prófugos por el robo que lograron escapar pero no han sido ni detenidos ni identificados.
Al tratarse de una causa en la que interviene un policía bonaerense, la búsqueda quedó en manos de la Policía Federal, desde donde no han dado ninguna información respecto de la investigación.
EMJ