Sucedió en el barrio Residencial Sur. Además del chofer, viajaban dos pasajeros. El video del accidente que no terminó en tragedia de milagro.
Un dramático accidente de tránsito que de milagro no terminó en tragedia ocurrió este miércoles en el barrio Residencial Sur de Córdoba, donde un colectivo se incrustó en un galpón abandonado y provocó el derrumbe de la pared de una casa lindera.
La secuencia, registrada por una cámara de seguridad de la zona, sucedió alrededor de las 6.25, cuando un chofer de la línea 31 de la empresa de transporte urbano Tamse perdió el control del vehículo, cruzó de carril en la avenida Armada Argentina, atravesó el cantero central e impactó contra un muro de ladrillos.
Al margen del colectivero, también iban a bordo dos pasajeros. Pudieron bajar por «sus propios medios» y, como no habían sufrido lesiones, se retiraron de lugar porque «tenían compromisos», según informó un comisario local. En tanto, el chofer tuvo varios traumatismos y fue asistido por el servicio de emergencia del 107.
El presidente de Tamse, Eduardo Ramírez, explicó: “El colectivo es de la línea 33, que en realidad estaba cortando para ir a hacer refuerzo en barrio Cabildo. En ese trayecto entendemos que no debería haber pasaje y lo que le manifiesta el conductor al jefe de tráfico es que venía vacío”.
Además, aseguró que no había ningún pasajero a bordo, a pesar de que en el parte policial se detalla que dos personas viajaban en el colectivo al momento del impacto.
El relato del accidente y la bronca del dueño del galpón
Una mujer que vive en la propiedad afectada relató: «Sentí una explosión grande y una polvareda junto a una persona que pedía auxilio. Llamamos a la Policía y vimos que se había caído una parte de la pared de mi living. El colectivo se metió al lado pero fue tan fuerte el impacto que se cayó una parte de mi pared y de mi ventana. No teníamos idea de qué había pasado, sentimos la explosión».
Por su parte, Rubén Echevarría, dueño de la vivienda, señaló: «Si sacan el colectivo, se cae la pared del otro lado. Estaba con mi suegro y mi señora. Sintieron una explosión y se levantaron».
Además, deslizó la posible causa del accidente: «Al parecer el chofer se quedó dormido. No puedo decirlo con seguridad, pero es lo que dicen».
Por su parte, Héctor Cativo, dueño del galpón parcialmente destruido, contó que el lugar estaba vacío porque iban a alquilarlo y lamentó: «No tengo mucha seguridad de quién se va a hacer cargo. Dicen que van a venir a armar una pared, pero está toda la estructura mal. Está todo a punto de caerse«.
ES