9 de julio de 2024 – 01:15
Un informe elaborado en conjunto entre la Universidad de Oxford y el Instituto Reuters establece que la principal fuente de información para los habitantes de América Latina no es ni la televisión, ni la radio, ni los medios digitales ni los gráficos. La principal fuente de información es Tik Tok, la red social de videos que duran apenas entre 5 segundos y 3 minutos.
Si al comienzo de su existencia Tik Tok era dedicado casi exclusivamente a videos para entretener, de a poco fue añadiendo contenidos de distinto tipo, incluidos algunos informativos. Pero, por lo general, la escasa duración de los videos y la cuestionable calidad de la información que por esa vía se difunde, incide en la confiabilidad de su contenido. Además, como sucede con toda red social, y a diferencia de los medios de comunicación social, los emisores no tienen una responsabilidad profesional respecto de lo que difunden. De modo que las fake news o las distorsiones informativas forman parte inescindible de este modo de comunicar. Y sus usuarios no corren riesgos de sanciones severas como sí ocurre con el ejercicio del periodismo.
Otras redes sociales utilizadas de un modo recurrente para informarse son X, Facebook y YouTube.
El estudio derrumba también un prejuicio: que Tik Tok es utilizada solamente por jóvenes. Aunque son mayoría, cada vez más adultos lo utilizan con fines de entretenimiento o de acceso a información.
Al mismo tiempo que se conocía el contenido del informe, la investigadora en comunicación, periodista y doctora en Filosofía de la Universidad de París, Alicia Entel presentaba su “Diccionario de Comunicación”, en la que reflexiona sobre los desafíos del mundo de la comunicación y el periodismo. En una entrevista, alerta sobre los riesgos de la desinformación y sobre los desafíos que le competen a la profesión en el campo de la comunicación, no siempre correctamente valorado. “Quizás la principal regla en este campo sea la de la verosimilitud: no podemos decir cualquier cosa. Si los médicos hacen cualquier cosa pueden matar gente, la comunicación también. Es muy delicado, hay que entender que nuestro campo es estratégico”, sostiene Entel.
Y agrega, respecto del auge de las redes sociales: “Ahora cualquiera puede inventarte algo, un discurso que se difunde y que es susceptible de ser creído por masas de población como algo verdadero. Por eso, para combatir esta situación se requiere de conceptos que puedan desarmar sentidos comunes. Esa es la única manera de reivindicar el estatus científico de la comunicación social”. Y podría añadirse, en el terreno de las reivindicaciones, el valor de los medios de comunicación ejercido de un modo profesional, con información fidedigna y verificable, respetando los estándares de calidad y formando a una audiencia crítica que no “compre” cualquier discurso y que no se informe preferentemente por videos con valor visual y técnico pero escaso rigor informativo.