El Albiazul se reposiciona y figura cuarto en la tabla. Foto: Talleres oficial.

Talleres liquidó el pleito en un minuto de la mano de un descomunal Michael Santos, que se lleva la pelota a sus vitrinas por convertir tres golazos en el triunfo sobre Rosario Central por 3 a 1. Un partidazo con todas las letras que tuvo emociones, presiones, polémicas y de fondo un marco terrible. El Albiazul aprovechó la jerarquía del uruguayo para quedarse con tres puntos claves y escalar en las posiciones, por la Liga Profesional.

Y eso que la visita trajo casi 10 mil hinchas. En el Kempes hubo más de 50 mil espectadores y el show fue a la altura. El equipo de Javier Gandolfi necesitaba reponerse luego de un paso en falso en La Plata y una semana con algunas polémicas, sobre todo con Diego Valoyes. Sin embargo, salió como una topadora para ganar y a los 57 segundos ya se había puesto en ventaja de la mano de Santos: córner desde la derecha, conexión incompleta de Catalán y desde el segundo palo, el uruguayo la mandó a la red.

Comenzó a crecer de esa forma la visita, Talleres retrocedió para apostar a una contra y con Ramón Sosa casi marca otra vez pero su remate pegó en Broun y en el palo. De contra Rosario Central tuvo dos importantes chances para empatar, con Infantino, una en cada palo y con Campaz, obligando la estirada de Guido Herrera. Pero el arquero no pudo hacer nada con el disparo tremendo de tiro libre de Alan Rodríguez que se incrustó en el ángulo, inatajable, para el empate parcial.

El complemento también fue cambiante, ingresó Nahuel Bustos para sumar presencia ofensiva  y tuvo una de cabeza para desnivelar. Hasta que ingresó Diego Valoyes por la banda, retrocedió Garro casi de doble cinco y luego la inspiración de Santos hizo lo propio: primero con un enganche y zurdazo a pura jerarquía para desnivelar con un remate inapelable y menos de un minuto después, el uruguayo aprovechó una sensacional asistencia a la carrera de Valoyes para liquidar el partido. Ojo, la lesión de Montoya fue clave para que el Albiazul inclinara la cancha, debilitando a los rosarinos sin dudas.

Santos fue la pieza clave a pura dimensión. Estuvo acompañado por varios compañeros como Villagra, Sosa y el mismo Herrera cuando la mano venía pesada y de esa forma Talleres recupera confianza para volver a posicionarse.

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