Fieles de todo el país llegan a la localidad cordobesa de Reducción para celebrar la tradicional Fiesta del Cristo de Buena Muerte que se lleva a cabo este 1 de mayo en honor al Día del Trabajador, día en que inician las jornadas festivas que culminan el 12 de mayo.  

Los peregrinos llegan sobre todo desde las localidades vecinas y  organizan peregrinaciones a pie, en bicicleta o a caballo para llegar hasta el Santuario del Señor de la Buena Muerte, en un amplio espacio frente a la plaza central.

El obispo de Río Cuarto, Adolfo Armando Uriona, quien preside la especial Misa del Día del Trabajador, habló sobre la tradicional celebración.

«La gente que viene aquí tiene una religiosidad popular en el corazón, hace que vengan especialmente en estos momentos de crisis porque sienten la necesidad de la ayuda del señor para poder salir adelante», señaló.

En esa línea, manifestó que Argentina «está viviendo una crisis muy fuerte». Y agregó: «Nuestro pueblo está anhelante de paz: no solamente en el tema económico y social, sino también en el tema de la violencia en nuestra sociedad, y eso es lo que también vienen a buscar a Reducción».

Por otra parte, Uriona aseguró que como obispos de la diócesis de Córdoba «no se sienten escuchados» frente a las autoridades, y dijo que con la homilía de la Misa especial del Día del Trabajador espera llegar al corazón «de las personas de buena voluntad y de las autoridades».

Por último, el obispo bendijo a todos los trabajadores y a quienes buscan trabajo.