maialen-chourraut,-piraguista:-“me-presiono-mucho-a-mi-misma-y-disfruto-mucho-pero-el-camino-se-me-hace-agotador”

Maialen Chourraut, piragüista: “Me presiono mucho a mí misma y disfruto mucho pero el camino se me hace agotador”

La histórica piragüista olímpica, Maialen Chourraut, participará en sus quintos Juegos Olímpicos en París 2024. Tras haber logrado las tres medallas (Oro en Río, Plata en Tokio y Broce en Londres), intentará hacer más historia en París. Chourraut lleva desde 1995 practicando el piragüismo, donde comenzó su histórica andadura en el club Atlético San Sebastián. Chourraut nos habla de los JJOO que ha disputado hasta ahora, de cómo afronta estos Juegos y por qué rechazó la oportunidad de ser abanderada olímpica, entre otras cosas.

El canal de París ya lo conoce, dado que compitió ahí en el Campeonato del Mundo el año pasado, pero el circuito en el que competirán no lo saben hasta el día anterior o el mismo día de la competición, que es cuando conocerán las posiciones de las puertas. Se trata de los mismos constructores del canal de Tokio, Río y Londres y, aunque el canal de París no parezca tan fuerte como el de Londres, tiene muchos movimientos concentrados, por lo que será un recorrido muy exigente. 

Consiguió la clasificación a sus quintos JJOO tras las dos rondas clasificatorias del selectivo nacional en La Seu d’Urgell y Pau (Francia). ¿Qué sintió al lograrlo?

Alivio. Sentí mucho alivio. Lo viví con mucha tensión pero después, cuando lo conseguí, sentí mucho alivio. La verdad es que fueron muchos minutos en la que vi mi cabeza fuera de estos Juegos. Tenía mucha ilusión de estar en París. Una vez lo conseguí sentí mucha satisfacción y ahora ya toca prepararme para los JJOO y cambiar el chip. Era muy difícil estar pensando en París sin todavía estar clasificados. 

¿Qué supuso la clasificación para sus quintos JJOO?

Es un número, ¿no? Estos selectivos han sido muy duros. La verdad es que todos los selectivos son duros. Conseguir una plaza olímpica es una ardua tarea. Hay muchos momentos en el que te ves fuera pero hemos seguido trabajando con la ilusión de poder conseguirlo. He tenido una gran suerte de haber podido vivir cuatro JJOO y ahora poder vivir el quinto. 

Ha participado en cuatro Juegos Olímpicos (Pekín 2008, Londres 2012, Río de Janeiro 2016 y Tokio 2020). ¿Qué recuerdos guarda de estas experiencias?

Son bonitos y, a la vez, diferentes recuerdos. Bonitos pero también duros. Los JJOO de Pekín, mis primeros, fueron una pasada. Fui a ellos con la ilusión de hacer un gran trabajo. Preparamos muchísimo esos Juegos. Lo que sucedió es que, en las clasificatorias, en la primera manga, me salté una puerta. En aquel entonces, en las clasificatorias se sumaban las dos bajadas. En la primera bajada, al haberme saltado una puerta ya me quedaba casi sin opciones de avanzar en los JJOO, porque me penalizaron 50 segundos. Fue una experiencia bastante amarga. Pero eso me sirvió para poder estar en mis segundos Juegos. Me dije en mi interior que trabajase lo mejor posible, aunque eso no quiere decir que para Pekín no lo hiciera. Entonces, a partir de 2009, maduré deportivamente y empecé a estar en los primeros puestos, en las experiencias internacionales, quedé segunda en el ranking mundial…

«En Londres conseguí la medalla de bronce y, aunque para nuestro equipo significó mucho, para mi fue poco»

En Londres 2012 conseguí la medalla de bronce y, aunque para nuestro equipo significó mucho, para mi fue poco. Estuve muy cerca de ganar los Juegos en Londres. Tuve una preparación impresionante, un estado de forma increíble… Parecía que tenía la victoria, estaba compitiendo de una forma muy, muy buena. Estuve muy cerca de ganar, quedé tercera y me fui a casa un poco triste porque vi muy cerca pasar la oportunidad. Necesitábamos la medalla, porque a nuestro equipo le costaba sacar las cosas adelante para poder tener actividad. Nos costaba muchísimo poder realizar una actividad normal para poder tener un buen rendimiento, porque nuestros presupuestos eran muy pequeños. Y esa medalla nos ayudó. Aunque los años posteriores fueron duros para el equipo.

Después llegó Río. En Río decidimos dar un paso adelante y formar una familia y, al mismo tiempo, soñar con poder ganar los JJOO. En el momento que decidí ser madre fue cuando mejor me encontraba deportivamente. Quise compaginar ambas cosas (el deporte y la maternidad) y lo conseguimos. Eso sí, el camino no fue nada sencillo. Ahora, con la distancia, admiro el trabajo realizado. En el momento, lo disfruté muchísimo pero también lo sufrí. El no dormir, el dar lo máximo físicamente, estar en esa exigencia física continua… y, sobre todo, criar a un bebé al mismo tiempo. El intentar sacar el máximo rendimiento es una exigencia física muy fuerte. Pero conseguimos realizar el sueño olímpico que teníamos. En el momento no me lo creía, me parecía como si no fuera real. De haberlo soñado tantas veces, después de conseguirlo, no me entraba en la cabeza.

Después, llegó otra etapa, la de Tokio. Una etapa dura. La exigencia física y mental me pasó factura. Gracias a la pandemia pude alarga un año la preparación y fueron unos Juegos en los que en eso también la suerte me acompañó.

«Después de Tokio tuve que decidir si seguir o no. Decidí seguir»

Después de Tokio tuve que decidir si seguir o no, qué hacer con mi carrera deportiva y personal. Decidí seguir. Ha entrado una nueva modalidad en el calendario olímpico, que es la prueba de Kayak Cross y la verdad es que me hace mucha ilusión ir a unos JJOO y poder competir en dos disciplinas. Ahora estoy en la recta final, con muchas ganas de competir y con mucha ilusión. 

¿Cuál lo recuerda con más cariño?

Todos los Juegos han sido muy especiales. No destaco uno del otro. Todos han tenido su cosas particulares. Al final, todos son diferentes y los recuerdo todos con mucho cariño. Disfruté muchísimo todos los JJOO, pero sobre todo los de Londres. Fueron unos JJOO impresionantes. A todos les guardo especial cariño, incluso a los de Pekín, que realmente lo pasé mal. Me caí fuertemente. Competí mal. Pero me llevé tantos aprendizajes conmigo que, todo lo que he hecho hasta ahora, no hubiese sido posible sin ese batacazo en Pekín.

«En Pekín lo pasé realmente mal»

Maialen Chourraut después de ganar la medalla de Oro en Río 2016.

Maialen Chourraut después de ganar la medalla de Oro en Río 2016. / LEONARDO MUÑOZ

Ahora se prepara para sus quintos Juegos Olímpicos, París 2024 ¿Cuáles son sus objetivos para esta cita?

El objetivo es remar lo mejor posible. Dar lo máximo de mí misma y tener una navegación sólida. Me centro mucho en la navegación y en dar mi mejor versión. Mi objetivo es hacer una bajada a mi mejor nivel.

Aunque sean tus quintos JJOO, la ilusión será como la del primer día, ¿o no?

La ilusión es la misma. No tengo ningún problema en motivarme a mí misma. La ilusión es algo que no se me para.

¿De dónde se saca la motivación después de haber ganado tanto?

Pocas veces se consigue tener un resultado que te satisfaga. La parte de competir es bastante frustrante porque es muy difícil sacar resultados. A veces hay bajadas que tanto has trabajado, e ir a casa con un mal resultado no es bueno. Intento hacer una valoración de cómo he estado tanto físicamente como mentalmente e intento mejorar esos aspectos. Este es un deporte divertido: vamos cuesta abajo, jugando con el agua, sintiéndola…

Siempre hay cosas que aprender y mejorar. Si nos estancamos con lo que tenemos, empeoramos. Porque el deporte va evolucionando. Y tengo que estar centrada para seguir mejorando, analizar lo que tienes que mejorar y trabajar, trabajar y trabajar para mejorar esos aspectos. Así consigues las mejoras, intentándolo e intentándolo. Una villa y otra. Ves que no te sale, pero el día que te sale y eso compensa todo el sacrificio.

Después de Tokio 2020, en la época del Covid, los JJOO vuelven a la normalidad. ¿Cómo se lo espera?

Todos los Juegos son diferentes. Los de Tokio los disfruté un montón, me lo pasé de diez. No teníamos el calor del público pero teníamos el apoyo de los organizadores, del equipo… Se respiraba ese espíritu olímpico. Fueron muy especiales. Los de París también serán distintos. Creo que eso está asegurado. Francia tiene una gran cultura deportiva y una gran organización. Entonces me espero unos Juegos preciosos. 

Tras tantos JJOO y competiciones, ¿podría contar alguna vivencia surrealista que le haya ocurrido?

Tengo una anécdota intentando conseguir la plaza olímpica en el Campeonato del Mundo para los Juegos de Pekín. Fue en el año 2007. Justo en la salida de las semifinales donde se jugaba el equipo la plaza olímpica, de las dos chicas que participaban para conseguir la plaza olímpica, me tocaba bajar a mí y, en el momento en el que me aproximo a la salida cuando me tocaba bajar, se me enganchó la piragua en unos hierros, la corriente me empujaba hacia abajo y se me rompió la piragua y tuve que salir nadando. Vi como el árbitro me dijo que saliera nadando, no sabía ella tampoco muy bien cómo actuar. Yo le gritaba “¡ayúdame, ayúdame!”. Se adentraron al agua tres personas de mi equipo, también entrenadores de otros equipos para sacarme con toda la piragua rota. Mientras estaba nadando en el agua escuchaba como un pitido que ni sabía lo que era. Entonces salí del agua. La organización se sintió con responsabilidad de lo ocurrido, porque la salida de la prueba era en un sitio complicado y lo pusieron mal. Me dejaron salir de nuevo cinco minutos después. Me pusieron cinta adhesiva en la punta de la piragua y así tuve que hacer la bajada, con la piragua llena de agua ya que estaba completamente rota con lo ocurrido. Aun así, entré en la final por poquito y conseguí la plaza olímpica. Al final salió todo bien. 

¿Cómo va El canal de Gipuzkoa que se iba a construir que le prometieron tras tantos éxitos? ¿Confía en estrenarlo compitiendo?

«El proyecto del canal de Usurbil sigue adelante. Poco a poco y con buena letra. Espero que podamos disfrutar de ese canal lo antes posible»

El proyecto sigue adelante. Poco a poco y con buena letra. Espero que podamos disfrutar de ese canal lo antes posible. Espero que me toque disfrutarlo en activo. Si no, los guipuzcoanos que vienen atrás, que vienen pisando muy fuerte lo podrán disfrutar. Seguro que les dará muchísimo juego. 

Abanderada

Se planteó la posibilidad de ser abanderada, pero compitiendo el siguiente día quizá tenía difícil encaje.

Son años de trabajo para llegar hasta aquí. El camino para conseguir esta plaza olímpica no ha sido sencillo. No es solo con los JJOO, es el ir e intentarlo hacer lo mejor posible. En ese intento de hacerlo lo mejor posible es muy importante cuidar el descanso, la alimentación, los entrenamientos… Entonces, el día anterior de los JJOO, el día anterior a competir es mucho estrés emocional. Por lo tanto, lo mejor es que todo esté lo más tranquilo y estable posible. Esto ha sido una decisión personal. Cada persona no vive de la misma manera el afrontar la competición. Mi manera es buscar estar lo más tranquila posible y respetar muchísimo esos momentos de descanso porque las noches no son sencillas, se hacen largas. Entonces para mí no es compatible una cosa con la otra. 

«Me gusta estar lo más tranquila posible y respetar muchísimo esos momentos de descanso. Entonces para mí no es compatible una cosa con la otra»

Maialen Chourraut descendiendo en canal.

Maialen Chourraut descendiendo en canal. / AGUSTI CUCURULLS

¿Serán sus últimos JJOO o piensa ir a por los sextos?

A los siguientes llegaría con 45 años. No soy la única persona que quiere ir a los JJOO, hay muchas más deportistas y piragüistas que quieren estar allí, que están entrenando cada día y dado lo mejor de ellas mismas y que quieren vivir lo que es estar en los JJOO y competir al máximo nivel. De aquí a cuatro años, no lo visualizo, me parece que es imposible. No sería por falta de ganas, ya es por una cuestión física. Pero nunca se sabe. 

«No me visualizo en los próximos JJOO, me parece imposible. No por falta de ganas, sino por una cuestión física. Pero nunca se sabe»

El hecho de que la preparación para estos JJOO sea de tres años en vez de cuatro, ¿lo ha hecho más llevadero?

Yo no he notado diferencia si ha sido una preparación de tres o de cuatro años. A mí se me ha hecho igual de largo o igual de corto. Eso sí, en los JJOO de Tokio, esa preparación de cinco años se me hizo muy dura. Fue muy larga. Pero también se me hizo larga porque no fueron años sencillos. Pero ahora me dices que han pasado tres o cuatro años y no lo distinguiría. En este camino hemos hecho muchas cosas y no se me ha hecho ni largo ni corto. 

En familia

¿La presencia de Pau hace que estos Juegos sean más especiales?

Ir a París con Pau va a ser la caña. Va a a ser muy especial compartir con él estos momentos, compartir la preparación… Verle competir va a ser para mí de las cosas más ilusionantes. Va a ser increíble. Será algo muy, muy especial. 

¿Le da muchos consejos a Pau?

Pau no me pide consejos. En nuestra casa está nuestro entrenador, que es su padre y también mi marido. En casa se respira piragüismo. En nuestro día a día se respira piragüismo y se habla muchísimo de ello. Vamos creciendo con ello. Crecemos tanto él como piragüista y persona; como yo como piragüista y persona y Xabi; como entrenador y persona. Además Pau ya estuvo en los Juegos de Tokio como abridor y como demostrador de recorrido. Entonces lo ha visto y vivido desde dentro. Ya sabe de qué va la cosa. Además, no ha visto. Ha vivido todo desde pequeñito.

¿En casa no se hablará de otra cosa que no sea piragua o desconectan?

Hablamos mucho de piragüismo. No hacemos punto y aparte cuando cruzamos la puerta de casa. Hablamos de piragüismo y de otras cosas también. Pero muchísimo de piragüismo, porque nos gusta. Si hay una competición, la vemos. Al final, somos unos privilegiados. 

¿Ve en Miren Lazkano y Pau Etxaniz una nueva generación?

Ya han dado éxitos guipuzcoanos al piragüismo los dos. Miren fue Campeona de Europa en el año 2021 con sólo 23 años. Pau estuvo el año pasado en la final del campeonato de Europa como en el del Mundo. Ganó la medalla de oro en patrullas. Llevan muchos años destacando. Tienen un presenta impresionante y un futuro también. Si siguen trabajando con las ganas que trabajan, con esa concentración… es una gozada verlos enfocados en su trabajo. Si siguen trabajando así seguirán teniendo las puertas abiertas a tener una bonita carrera deportiva. De hecho, desde mi punto de vista, esa buena carrera deportiva ya la tienen. El camino que están realizando es increíble.

Preparación física y mental

¿Cómo se prepara mental y físicamente para una competición tan importante?

La preparación mental la llevo junto a Joxean Agunza desde 2020. Lo que para mí es importante es que visualizo mucho durante toda la preparación. Visualizo dónde, cómo quiero ir y actuar.

¿Cómo lidia con la presión de competir al más alto nivel?

Yo me presiono mucho a mí misma. Suelo presionarme mucho tanto en la Copa de Euskadi como en los mismos JJOO. Disfruto mucho pero el camino se me hace agotador. Pero me gusta estar ahí. Tener que ir adelante porque no te queda otra. Me siento una privilegiada de poder vivir estos momentos para conseguir cosas grandes. 

¿Qué consejos daría a un joven deportista que quiere seguir sus pasos y llegar a ser campeón/a olímpico?

Que disfruten de lo que hacen. Que mientras más cuiden los aspectos más básicos de este deporte como el cómo remar, cómo mantener la postura del cuerpo, mantener la piragua lo más estable posible… si cuidas estos aspectos siempre, vas a disfrutar más de la navegación. Para eso hay que esforzarse mucho, son cosas como muy básicas pero hay que estar día a día concentrado. Les dirían también que, por supuesto, nada es sencillo. Para mejorar hay que esforzarse. Esto lo traslado ya fuera de la piragua y el deporte. Lo traslado a todos los ámbitos de trabajo y vida personal. Con ilusión, esfuerzo y preparación disfrutaremos más. Es importante pensar en el resultado, pero tenemos que enfocarnos en el camino y en el esfuerzo que realizamos haciendo lo que nos gusta. Al fin y al cabo, es algo que hemos elegido nosotros. Siempre para hacer eso que nos gusta hay que hacer otras cosas que no nos agradan tanto, pero son necesarias si queremos seguir evolucionando.