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Toto Kirzner se disculpó con Pepe Cibrián pero él no aceptó: qué dijo

Tomás “Toto” Kirzner, hijo de Adrián Suar y Araceli González, se disculpó públicamente con Pepe Cibrián tras sus desafortunados comentarios en el canal de streaming Olga que provocaron la indignación del director teatral y el repudio de miles de usuarios en las redes sociales.

“Estuvo dando vueltas mi clip en el que me estoy riendo cuando estoy narrando una atrocidad, que eso es cierto y se banaliza automáticamente”, reconoció Toto en Mi primo es así, el programa que comparte con Martín Rechimuzzi, Noelia Custodio y Evelyn Botto.

En su explicación, Kirzner sostuvo que “más allá de que esté descontextualizado o se edite en un momento”, el escenario “no importa”. “Yo me estoy riendo mientras cuento algo terrible y eso es lo que se ve, que no fue mi intención”, insistió.

El joven actor también se refirió al horror que él mismo vivió: fue víctima de dos abusos sexuales. Sin embargo, aclaró que no pretendía victimizarse ni cambiar el tema. “No quiero desviar el foco, pero es para aclarar que yo jamás faltaría el respeto a una historia semejante. Siempre lo trato con mucho respeto y desde mi lugar”, afirmó.

Dirigiéndose directamente a Cibrián, Kirzner expresó: “Quiero hacer concretas mis disculpas porque pido perdón. Te pido perdón Pepe y pido perdón por haber banalizado una historia que, en realidad, me estoy riendo del remate que es el famoso clip de ‘¿Calle o Pepe?’, que estuvo en TVR, en Bendita, hace 15 años en la televisión y todos conocemos”.

Para concluir sus disculpas, Toto, expresó: “Asumo mi error de estar riéndome y no darme cuenta de lo que estaba diciendo ni las consecuencias, que recibí a las trompadas. Y está bien, tiene sentido, porque es un espanto el clip, por eso pido perdón, fui un estúpido. Fui un estúpido que no se dio cuenta. Quería pedir perdón públicamente a Pepe”.

Cómo respondió Pepe Cibrián al pedido de disculpas de Toto Kizner

No obstante, estas palabras no conmovieron a Cibrián, quien al hablar con A la tarde aseguró que no las aceptaba. El director teatral no abandonó su postura, reafirmó su enojo y dejó en claro su posición.

“No creo que haya sido una cosa muy casual el que hayan hecho esto, este programa no fue improvisado. Yo peleé toda mi vida por lo que sentí que tenía que pelear, he sido comprometido con mi trabajo, con la cultura, con los jóvenes. Cuando empezaron a hacerme esta broma de ‘orín/orina’, que no entendía muy bien porque no soy mucho del Instagram, pero sí me habían invadido y afectado mi trabajo”, comenzó diciendo Cibrián.

Luego de que el director teatral explicara su lucha y su postura, Karina Mazzocco le preguntó por las palabras de Toto, quien se mostró arrepentido por la situación. “¿Aceptás las disculpas?”, quiso saber la conductora.

Tajante y enfurecido, Pepe respondió: “No. Lo escuché, pero qué me importa. Me parece una aberración. La intención fue lo que hicieron. Tocó lo más sensible de mi vida, no puedo aceptar las disculpas. Que se las dé a los abogados, a la ley, a las chicas de cinco años que arriesgan la vida para poder comer. Estos chicos transgredieron, yo no hablo por mí, hablo por esta chica, tampoco soy un héroe. Yo no tengo que disculpar a nadie. Yo hablo porque siento que sí aporto algo”.

El dramaturgo detalló que, a su parecer, los streamers entendían completamente el contexto de su antigua charla con Susana Giménez, lo que incrementaba su enojo: “Cuando este chico (Kirzner) dice vamos a decir: ‘Calle o Pepe’; ahí dije: ‘Wow, qué duro va a ser esto’. Este chico hace una parodia de lo que le dije a Susana. Lo de Susana fue después de que hablé en el Senado de la Nación, por lo que se promulgó la ley igualitaria”.

Por último, Pepe detalló que cuando Susana lo invitó a su programa lo hizo para hablar de su lucha para poder habilitar la adopción de menores. “Ahí explico que llevaba años tratando de adoptar tres hermanitos para darles la posibilidad de que no los separaran. Construí dormitorios para ellos, vinieron asesores, pero nunca me los dieron. Cuando le expliqué a Susana mi deseo de adopción, cuento como ejemplo el de la chica de cinco años. Como casi tuvo que hacerlo mi madre en la guerra civil española. Cuando escucho esta risa, cómo no me voy a sacar de mí”, cerró Cibrián.