Un movimiento interno en la composición del bloque legislativo de la Unión Cívica Radical en la Unicameral provincial podría ser la puerta para acercar al oficialismo al ansiado cuórum propio que tanto añora el gobernador Martín Llaryora y que forma parte del objetivo central que se impusieron las espadas parlamentarias de Hacemos Unidos por Córdoba desde el recambio del cuerpo, en diciembre del año pasado.
Desde la conformación de la nueva Unicameral, el oficialismo quedó a tres votos de los 36 necesarios para no depender de nadie para iniciar sesiones en la Legislatura. A los 33 “puros” del peronismo se le sumó la villamariense Karina Bruno, electa por Juntos por el Cambio, pero aliada al bloque de la mayoría a través de un acuerdo político que se selló tras los comicios y antes de asumir la banca. Sin ser del oficialismo, el libertario Agustín Spacessi se ha mostrado en contra de negar el cuórum. Por tal motivo, Hacemos Unidos lo cuenta como el número “35″.
Así las cosas, el oficialismo está a un voto de lograr el número necesario para habilitar las sesiones. Precisamente, la dificultad de no contar con los 36 fue determinante para que tras décadas, la Unicameral dejase de sesionar todos los miércoles para pasar a hacerlo cada 15 días.
Ahora, aunque con cautela, Hacemos Unidos por Córdoba cree estar más cerca del objetivo.
El oficialismo centra sus expectativas en el impacto que podría tener en el recinto un reacomodamiento que se produce por estas horas en el bloque de la UCR.
Ya no son 19
Sucede que desde ayer, el bloque radical en la Unicameral ya no cuenta con 19 legisladores como tenía hasta antes del actual receso legislativo. Ahora, ese espacio tendrá un miembro menos por la escisión de la bancada de la legisladora Graciela Bisotto.
Bisotto fue electa en los comicios celebrados a mediados del año pasado en la boleta de Juntos por el Cambio que encabezaron Luis Juez y Marcos Carasso. La radical ganó la banca departamental por Juárez Celman. Es cercana a Carasso, actual presidente de la UCR, con quien milita desde hace décadas en el sur provincial. En la UCR se la encasilla como parte de la línea interna que lidera Mario Negri. Pero Bisotto dice no responder a ningún liderazgo en particular.
Desde hace unos días circulaba la versión de la salida de Bisotto del bloque. Ayer se terminó de confirmar. Y el movimiento generó versiones de todo tipo.
La Voz consultó a la legisladora sobre los motivos del cambio y si había recibido algún tipo de ofrecimiento del oficialismo para abandonar las filas opositoras. Esto contestó: “No me voy de la UCR. No me voy a ningún lado. Sigo en la oposición y no hay ningún acuerdo con el peronismo”.
Bisotto dijo estar al tanto de las especulaciones que se tejen por estas horas en torno a su nueva posición dentro de Juntos por el Cambio y cómo podría impactar eso en el número para el cuórum. “Dar o no cuórum es una herramienta política que se utiliza para situaciones especiales en donde no hay puntos de acuerdo y está cancelada la negociación. Eso pienso al respecto”, contestó sobre futuros posicionamientos.
Según relatan quienes hasta ayer eran compañeros de bancada, en las últimas sesiones, cuando se tensó la relación entre el oficialismo y la oposición en torno al debate sobre los cambio en el reglamento interno, Bisotto se mostró a favor de habilitar el debate en el recinto.
En el oficialismo, en tanto, reina la cautela. “Es un tema de los radicales. No tenemos nada que ver”, aseguran desde despachos oficiales.
Cerca del gobernador manifestaron lo mismo, aunque reconocieron que una mayor cantidad de monobloques dentro del ecosistema opositor mejora las chances de generar negociaciones en pos de lograr destrabar los inicios de las sesiones cuando hay temas conflictivos para debatir.
Impacto en la oposición
“La conformación de este monobloque es una manera diferente de seguir trabajando para el interior”, sumó Bisotto para explicar su escisión. A partir de ahora, la oriunda de La Carlota tendrá un rol más visible y de mayor juego en la Unicameral. Por ejemplo, podrá participar de las reuniones de Labor Parlamentaria, un lugar reservado para los presidentes de bloques y las autoridades de cámara.
A través de un mensaje en el grupo de WhatsApp del interbloque de Juntos por el Cambio, la legisladora avisó a sus pares del cambio. “Voy a seguir trabajando por los valores de la UCR”, dice en una parte del texto.
“Ella nos dijo que no se va de la oposición. Que sigue con nosotros, pero desde otro lugar”, comentó a este medio un legislador del espacio.
En la bancada radical, la novedad no fue una sorpresa. “Bisotto venía dando señales de no estar cómoda en el bloque. Quiere mayor juego propio”, aseguró otro excompañero de espacio.
Bisotto tomó una decisión parecida a la que meses atrás adoptó Dante Rossi, que junto al legislador Sebastián Peralta constituyeron el bloque Construyendo Córdoba.
El ajustado equilibrio de fuerzas que existe desde el 10 de diciembre en la Unicameral entre oficialista y opositores hace que cada novedad que se produce en los bloques genere especulaciones.
La bancada que responde al gobernador Llaryora ha intentado desde el inicio de esta nueva conformación legislativa sumar voluntades que alivien la paridad que determinaron los comicios provinciales de hace un año. Hasta el momento, el núcleo duro opositor se mantiene unido.