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Un insólito pedido, un reclamo y una queja en la última audiencia del juicio por el femicidio de Anahí Benítez

Entró en la recta final el segundo juicio por el femicidio de Anahí Benítez, la adolescente de 16 años que fue hallada asesinada y violada en 2017 en la reserva Santa Catalina, de Lomas de Zamora. Este lunes, durante la última jornada del debate, los acusados Marcos Bazán (39) y Marcelo Villalba (46) pronunciaron sus últimas palabras. Mientras que el primero pidió por el “Ni una menos” y que no “haya gente inocente presa”; el otro solo les solicitó a los jueces volver a su lugar de detención. El veredicto se conocerá el próximo martes 16 de mayo.

El Tribunal Oral en lo Criminal N° 7 de Lomas de Zamora también aceptó escuchar las últimas palabras de Silvia Pérez Vilor, la madre de la víctima, quien dijo sentirse “nada representada por el Estado” en este debate y pidió la pena de prisión perpetua para Bazán, para quien la fiscalía ya había solicitado la absolución.

Es que, previo a los alegatos, sobrevoló el rumor en los tribunales de que la fiscal Marisa Monti desistiría de la acusación contra Bazán y eso fue de la mano con la viralización de una captura de pantalla del año 2020 con un curioso “Me gusta” de la funcionaria judicial a una publicación donde se resaltaba la inocencia de ese imputado. Por eso el “desencanto” con la representante de la mamá de Anahí.

La audiencia de este lunes se transmitió por el canal de YouTube de la Suprema Corte de Justicia bonaerense y comenzó pasadas las 11.30 con las réplicas de cada una de las partes a los planteos y peticiones que se hicieron durante los alegatos. Al término de la exposición, los jueces Daniel Mazzini, Santiago Márquez y Gustavo Ramilo, le dieron la oportunidad de hablar a los dos imputados.

Bazán se puso de pie para hablar, pero los jueces le dijeron que lo hiciera sentado, junto a sus abogados. Desde allí, el acusado tomó el micrófono y dijo: “En primer lugar, lamento lo que le haya pasado a Anahí, lamento lo que le pasó a la familia, han perdido a su hija. Yo lamento de verdad lo que le pasó”.

Luego, descartó que su casa haya sido escenario del crimen y se desvinculó de la víctima y del otro imputado, al afirmar: “En mi casa no estuvo Anahí, no conozco a Villalba, no conozco a los compañeros de ella”. “Lo único que pedimos todos es ‘Justicia’ y que se investigue lo que se tenga que investigar, caiga quien caiga. No solamente ‘Ni una menos’, sino que tampoco haya gente inocente presa por delitos que lo acusan y no cometió”, sostuvo.

A su turno, Villalba desechó la posibilidad de hablar y solo les solicitó a los jueces, volver a su lugar de detención. Cuando le preguntaron si quería decir algo, respondió: “No, nada. Yo quería pedirles si me pueden reintegrar a la Unidad 34″, en referencia a la cárcel especializada en pacientes psiquiátricos ubicada en Melchor Romero.

Los jueces estaban a punto de cerrar la audiencia cuando el abogado Guillermo Bernard Krizan, quien representa como particular damnificada a la mamá de Anahí, le solicitó al tribunal que permitieran a Pérez Vilor dirigirles unas últimas palabras, algo que en lo formal está previsto solo para los imputados. Tras deliberar durante unos segundos, los jueces lo aceptaron y la mujer se despachó.

“Lo que quiero decir es que desde el corazón me sentí muy poco representada, o nada representada por el Estado en este juicio”, dijo en clara alusión a la postura asumida por la fiscal Monti que, en su alegato, solo pidió prisión perpetua para Villalba —el imputado comprometido por un estudio de ADN—, pero que reclamó la absolución de Bazán.

“Toda la prueba está en la causa. Lo que le pido a los señores jueces es que no valoren la interpretación de la prueba, sino que vayan al informe, lo lean y vean que tantas cosas juntas en una casa no pueden indicar que una persona no estuvo allí”, señaló sobre los supuestos indicios que, según su postura, incriminan a Bazán.

“Por último, quería agregar que no estoy de acuerdo ni con la absolución que dijo la fiscal ni siquiera con la participación secundaria que dijo mi defensor”, afirmó, cuestionando incluso lo planteado por su abogado en el alegato. Y cerró: “Yo estoy de acuerdo con el TOC N°7 anterior y pido la pena perpetua para el señor Bazán y para el señor Villalba. Nada más, muchas gracias”.

Hacia el final de la audiencia, los jueces Mazzini, Márquez y Ramilo anunciaron que darán a conocer el veredicto y la eventual sentencia el próximo 16 de mayo, a las 12.

En el primer juicio, realizado en 2020, Bazán había sido condenado a prisión perpetua, al ser considerado autor del crimen de Anahí. Villalba, en tanto, no fue juzgado porque los jueces entendieron que presentaba un cuadro “psicótico” y que no estaba en condiciones de estar en el debate.

Sin embargo, en diciembre de 2021, el Tribunal de Casación Penal bonaerense anuló la sentencia y ordenó la realización un nuevo juicio oral, que comenzó el 1° de marzo último ante el mismo TOC N°7 de Lomas de Zamora, aunque conformado por otros jueces.

En su alegato del 14 de abril último, la fiscal Monti solo pidió perpetua para Villalba, a quien consideró culpable de los delitos de “privación ilegal de la libertad agravada”, “robo”, “homicidio triplemente agravado por alevosía, criminis causa y por mediar violencia de género (femicidio)”, y de “abuso sexual agravado por acceso carnal”, en perjuicio de Anahí Benítez.

Pero la representante del Ministerio Público descartó que Bazán haya participado en el hecho y ligó su incriminación con la participación del adiestrador de perros Diego Tula, cuyo peritaje —concluía que Anahí había estado en la casa del acusado y que él estuvo en el sitio donde el cadáver de la adolescente fue hallado enterrado—, fue cuestionado por la falta de “rigor científico”.

El abogado Bernard Krizan, representante de la madre de la víctima, coincidió con la fiscal en pedir prisión perpetua para Villalba, pero respecto de Bazán solicitó 14 años de prisión al considerarlo “partícipe secundario” de los delitos endilgados al otro acusado y, alternativamente, requirió 5 años y 6 meses por el “encubrimiento agravado” de los mismos.

Los abogados Manuel Garrido, titular de la organización de derechos humanos Innocence Project, y Camila Calvo pidieron que Bazán sea considerado inocente en el segundo juicio por el caso. Roberto Fernández, defensor oficial de Villalba, el otro imputado por el crimen, cuyo ADN coincidió con el del semen hallado en el cuerpo de la víctima y que en su momento fue detenido luego de que le entregó el teléfono celular Samsung de Anahí a su hijo, solicitó que, en caso de encontrarlo coautor del homicidio, la pena no supere los 15 años de prisión por considerar que tiene una “inimputabilidad disminuida” al padecer “esquizofrenia, una enfermedad degenerativa”.