octubre 16 12:12 2024 Imprimir noticia

La nutricionista Sofía Reinoso dijo que por los alimentos que consumen, hoy en las infancias «hay una predisposición a la obesidad y a las alteraciones metabólicas». «Todo eso genera una adicción y luego es muy difícil poder cambiar esos hábitos alimenticios», alertó.

En el Día Mundial de la Alimentación, la nutricionista Sofía Reinoso dialogó con Riojavirtual y la especialista puso el foco en la relación que actualmente tienen las infancias con la alimentación y advirtió que hoy las niñas y niños «se crían en un ambiente obesogénico».

«Hay una falla en la alimentación desde la infancia. Los niños hoy se están criando en un ambiente super obesogénico. Y las escuelas no nos acompañan en la alimentación saludable. En las escuelas no hay alimentos saludables, los niños no pueden comprar fruta, o un yogurt. Solo venden sanguches, bebidas gaseosas, galletitas o alfajores. Ese es el principal problema, son niños que se alimentan a base de grasas saturadas y azúcares desde muy pequeñitos. Y es muy difícil luego que, de grandes, poder cambiarles ese hábito», aseguró.

Reinoso sostuvo que hoy en las infancias, por el tipo de alimentación que tienen, «hay una predisposición a la obesidad y a las alteraciones metabólicas». «Estamos poniendo esta semilla desde muy chiquitos. Hace muchos años no había tantos alimentos procesados y ultraprocesados, todo era mucho más casero. Si bien eran alimentos calóricos, eran caseros», señaló.

La especialista dijo que hoy a las infancias «las estamos exponiendo a todas estas grasas y azúcares refinadas. «Todo eso genera una adicción en ellos y luego es muy difícil poder ir corrigiéndolos», alertó.

Para la nutricionista, en los adultos hay cierta conciencia de la necesidad de tener una alimentación saludable y marcó el contraste con las infancias. «La principal falencia está en la infancia, más que los adultos. Los niños no entienden aún el tema de la salud y comen lo que les dan sus papás y mamás», comentó.

Además, la especialista destacó «los altos grados de ansiedad» que hay en general en la sociedad y en especial en las infancias. «Hay altos grados de ansiedad, la gente no está acostumbrada a esperar y esto repercute un montón en la alimentación porque comen por ansiedad, el niño no sabe esperar, abren la heladera y comen a cualquier hora del día», comentó.

Por eso, recomendó no tener en el hogar alimentos procesados y ultraprocesados y en su lugar tener variedad de frutas y verduras.

Más adelante, Reinoso relativizó el factor económico para quienes sostienen que mantener y sostener una alimentación saludable es más costoso que una alimentación «tradicional». «La cuestión económica influye. Pero hay que tener en cuenta que hay gente que dice que la fruta y la verdura es muy cara pero toman bebidas cola, es como que la gaseosa no les puede faltar y tampoco esas bebidas son económicas. Llevar adelante una alimentación saludable es caro pero una alimentación no saludable también es caro», indicó.

En este punto, recomendó a la comunidad «estar al tanto de los precios de los alimentos» a la vez que aconsejó comprar frutas y verduras en ferias populares y no en supermercados «porque se consiguen mejores precios».

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