El domingo 30 de abril se cumplió un año de la denuncia por la desaparición de Josías Galeano (15). Había salido de su casa del barrio San Miguel y su cuerpo fue hallado sin vida, 34 días después en un bañado del barrio Prosol de Oberá.
El 12 de abril la familia de Antonio “Toñi” Ledesma, joven de 21 asesinado de un disparo en Campo Viera pocos minutos después de finalizado un partido de fútbol y cuando festejaba con su equipo haber conseguido el pase a la final del certamen amateur zonal.
Carolina Ramírez y Norma Macena, las madres de ambas víctimas encabezaron el sábado pasado una manifestación en el centro de Oberá para demostrar que la lucha será pacífica pero sin aflojar en su reclamo.
En el caso de Carolina, espera que la causa avance y esclarezca quién o quiénes asesinaron a Josías y si hubo o no participación de efectivos de la policía provincial en la desaparición y muerte.
Norma tampoco amaga siquiera con bajar los brazos y mucho menos porque, hace pocas semanas, la Justicia de Instrucción cambió la carátula y calificación por el crimen de “Toñi” de “homicidio simple” a “homicidio en riña” y excarceló a todos los sospechosos.
Uno de sus ocho hijos fue asesinado de un balazo en el abdomen el 25 de septiembre de 2022 frente a su vivienda del barrio Oeste en Campo Viera.
En el Centro Cívico obereño se reunieron con parcantas y fotos de sus hijos y ambas tomaron el micrófono para hablar concretamente: “Josías sabe que voy a luchar y lo que le hicieron y quiénes lo hicieron van a pagar con justicia. Josías, donde quiera que esté, sabe que yo no voy a parar, voy a seguir luchando aunque cada día me cueste más seguir sin él”, manifestó Carolina.
“Queremos que se investigue porque, más allá de todos los problemas que tuvo Josías con sus adicciones, no hay derecho a que le arrebaten su vida, no hay mamá que esté preparada para ver morir a un hijo”.
“Yo no voy a parar de luchar, Josías fue lo más lindo que Dios me dio y me lo arrebataron. La esperanza no la perdí y la fe tampoco. Quiero que se investiguen a todos los policías que lo persiguieron. Yo seguiré detrás de justicia por mi hijo y para todos los que ya no están acá también”.
Luego Norma sostuvo las lágrimas y habló frente a los demás participantes y ante un cronista de PRIMERA EDICIÓN: “Vine en memoria de todas las víctimas, eso incluye a mi hijo. Yo sé que para nosotras nada es fácil. Como madres, estamos pasando por el mismo dolor. A mí también me arrebataron a mi hijo”.
“Lo peor ocurrió hace unos días que cambiaron carátula, ya no sólo no hacen nada sino que nos insultan soltando a todos los asesinos (…) Solo pedimos justicia y mucha gente nos tendría que acompañar porque nadie está libre que le pase esto a sus hijos”.
Al momento de intentar una explicación sobre el padecimiento por el crimen dijo: “Es el dolor más grande que una madre puede sentir, que te arrebaten la vida de tu hijo. Es horrible, es como dice Carolina, no sé cómo estoy de pie todavía pero fingiendo todos los días que estoy bien y no es así, lo que tengo es el corazón destrozado, el alma destrozada”.
