Un grupo de vecinos del Barrio Progreso de esta localidad se reunió con las autoridades de la Cooperativa Eléctrica Limitada Oberá (CELO) para insistir nuevamente en que les instalen servicio de energía eléctrica y agua potable.
Según expresaron los residentes, al ser asentamiento, primero debieron aguardar el relevamiento de datos y censo del Registro Nacional de Barrios Populares (ReNaBaP), que es la entidad que otorga los correspondientes certificados de viviendas familiares. Cumplido ese paso, hace meses continúan esperando para acceder a agua potable y electricidad, pese a que ya tienen el permiso de la Municipalidad para la instalación de los servicios.
“Hace varios años hicimos el censo del ReNaBaP. Los vecinos tienen las herramientas para el acceso a los servicios; y tanto la Municipalidad como la CELO tienen todo para otorgar esos servicios básicos de luz, agua y cloacas. No se está cumpliendo, por eso el reclamo, y no sólo de El Progreso, están también Caballerizas y San Miguel” explicó a PRIMERA EDICIÓN Roque Sáez, uno de los vecinos.
Es así que, mientras esperan, las familias dependen del pozo perforado de una vecina y de conexiones clandestinas.
“Nadie quiere que se les instale gratis, están dispuestos a pagar como corresponde”, finalizó el vecino.