Un reciente monitoreo realizado por el Comité Provincial para la Prevención de la Tortura (CPPT) expuso la alarmante situación de las personas privadas de su libertad en comisarías de Neuquén, Centenario, Plottier y Senillosa. Según el informe, casi todas las dependencias monitoreadas presentan serios problemas de sobrepoblación y condiciones habitacionales degradantes, situación que atenta directamente contra los derechos humanos.

Durante los meses de julio y agosto de 2024, el CPPT inspeccionó 13 comisarías, donde se observó un hacinamiento generalizado y un incumplimiento del marco legal vigente, que prohíbe la permanencia de personas condenadas en estas instalaciones. Las condiciones deplorables incluyen instalaciones sanitarias en mal estado, falta de acceso adecuado a la luz, ventilación deficiente y la presencia de plagas como cucarachas y roedores. 

El estudio destaca que muchas de las personas detenidas se ven obligadas a dormir en el suelo debido a la falta de camas y colchones en buen estado. La sobrepoblación es tal que en algunos casos se duplicó el número de personas para el que fueron diseñadas las celdas. Además, se detectaron serios riesgos de seguridad, como instalaciones eléctricas precarias y la ausencia de sistemas contra incendios funcionales, lo que pone en peligro la vida de los internos.

A estas condiciones inhumanas se suma la mala calidad de los alimentos, que en varios casos fueron rechazados por los detenidos debido a su estado de descomposición o mal cocción. También se reportaron graves dificultades en el acceso a la atención médica y nulo acceso a educación, trabajo o actividades recreativas, lo que agrava aún más la situación.

El informe del CPPT no solo expone la crisis en las comisarías de la provincia, sino que también la sitúa en un contexto nacional alarmante. Según datos de la Comisión Nacional para la Prevención de la Tortura, la cantidad de personas detenidas en destacamentos policiales en Argentina creció un 144% entre 2016 y 2022, mientras que las cárceles están colapsadas. En Neuquén, la situación es aún más crítica: las comisarías tienen un 55,6% de sobrepoblación y los detenidos pasan un promedio de 205 días en condiciones transitorias, violando los estándares internacionales.

El informe finaliza con una serie de recomendaciones que buscan mejorar las condiciones de habitabilidad y asegurar el respeto a los derechos humanos en las comisarías. El CPPT alerta que, de no tomarse medidas inmediatas, la situación continuará deteriorándose, poniendo en riesgo la vida y la dignidad de las personas detenidas.