La Dirección de Protección al Consumidor inició un operativo de fiscalización en ópticas que venden productos para el cuidado visual, tales como monturas de gafas y anteojos de sol. El objetivo es verificar el cumplimiento de las normativas vigentes y controlar tanto el origen como el material de fabricación de estos productos.

Estas inspecciones se enmarcan dentro de la Resolución 269/2019 de la Secretaría de Comercio Interior, la cual establece que tanto fabricantes nacionales como importadores deben asegurar que sus productos cumplan con los requisitos técnicos de calidad y seguridad. Estas normativas están basadas en los estándares internacionales ISO 12870 e ISO 12312-1, que regulan la calidad óptica de los productos oftálmicos y la protección ocular frente a posibles daños.

La normativa también involucra a distribuidores, mayoristas y minoristas, quienes deben contar con una copia de la declaración jurada de cumplimiento de estas disposiciones para mostrarla en caso de ser solicitada por las autoridades.

Pablo Tomasini, director de Protección al Consumidor, destacó la importancia del operativo ante la creciente demanda estacional de estos productos. “Es fundamental prevenir problemas ópticos que puedan surgir por el uso de productos no certificados, los cuales pueden causar daños irreversibles en la vista”, señaló. Además, aclaró que las ópticas contarán con un período de adaptación, durante el cual recibirán asesoramiento técnico para implementar los cambios necesarios.

Con este operativo, se busca no solo mejorar la calidad de la atención al consumidor, sino también proteger la salud visual de los usuarios y garantizar que los productos cumplan con las normativas de seguridad y calidad que requieren las ópticas.