¿Para vos no hay mejores playas que las cariocas? Si tu corazón viajero palpita cuando piensa en Brasil, hay un destino puntual para que redescubras sus playas.

Se trata de Ilhabela, en la costa norte de São Paulo, que, como su traducción indica, es una bella isla de aguas turquesas, playas de arena radiante y una equilibrada combinación de tranquilidad y opciones para recrearse.

La separan 180 km de São Paulo, que, con sus 12 millones de habitantes, es activa y plagada de vida. Pero lo interesante es que hay alternativas para todos. Al norte hay muy buena hotelería, y ofertas variadas que le suman diversión a la vida al aire libre.

Una isla con playas para todos los gustos

Aunque también hay zonas más tranquilas, dónde mandan el relax y el contacto con la naturaleza, como Jabaquara o Castelhanos. También otras playas hermosas como Praia do Pinto, Praia da Armação y Praia da Feiticeira.

Su costa es extensa, de casi, 40 kilómetros y en ella los aventureros encontrarán senderos, cascadas y rincones de ensueño, para perderse en el disfrute del sol y la distensión.

El aeropuerto ideal para viajar hacia Ilhabela es el de Guarulhos, que está alejado del centro de São Paulo, por eso es más tranquilo y accesible.

Una reserva natural única

¿El dato? Lo más bello del lugar es su verdor y su paisaje selvático, dónde se ven tucanes y monos apareciendo a cada paso.

Ocurre que la isla es considerada reserva natural, por eso parece una esmeralda enclavada en medio de una sucesión de playas bellísimas. Imperdible.