En un nuevo episodio de declaraciones controvertidas, el presidente Javier Milei reiteró sus duros comentarios respecto al ex mandatario Raúl Alfonsín, al que ha acusado de haber incitado a un golpe de Estado. Las declaraciones tuvieron lugar en un encuentro celebrado en la provincia de Córdoba, organizado por la Fundación Mediterránea, un evento que coincidió con el 41 aniversario del triunfo electoral de Alfonsín, que marcó el retorno democrático en el país tras la última dictadura cívico-militar.

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Durante la conmemoración del Día de la Recuperación de la Democracia, Milei apuntó que Alfonsín «abandonó el poder seis meses antes de finalizar su mandato», citando la hiperinflación como la causa principal de esta retirada anticipada. A su vez, el presidente actual afirmó haber asumido el cargo en un contexto social con indicadores que describió como peor que los de la crisis de 2001, esbozando paralelismos con el modelo económico prevalente durante el liderazgo de Carlos Menem y Domingo Cavallo, figuras a las que Milei admira públicamente.

Acusaciones más severas surgieron cuando Milei señaló a Alfonsín como participante en un golpe de Estado junto a Eduardo Duhalde, un argumento repetido en sus intervenciones públicas. Al mismo tiempo, destacó lo que considera una doble moral al presentarlo como un símbolo de la democracia argentina, una posición en la que menciona la «pesificación de deuda a Clarín» como un acto que malinterpretó a Alfonsín como un héroe.

Los diatribas de Milei hacia el legado de Alfonsín no son nuevas; en una ocasión, incluso lo calificó de «fracasado e hiperinflacionario de Chascomús», utilizando además figuras de gran agresividad para reforzar sus palabras, tales como la adquisición de un muñeco para boxeo con el rostro de Alfonsín.

En un contexto electoral candente, antes de su llegada al poder, Milei equiparó la gestión de Alfonsín con la de Alberto Fernández, describiéndolo como uno de los peores gobiernos en la historia argentina. Estas comparaciones y controversias han logrado solidificar su relación con la provincia de Córdoba, un bastión político para Milei donde su popularidad amigablemente acogió estos juicios, ayudando significativamente a su éxito en las urnas en el pasado diciembre.