El Partido Justicialista enfrenta un nuevo capítulo de tensiones internas tras la decisión de Ricardo Quintela de llevar a la justicia su candidatura para competir en la próxima elección de las autoridades del partido. Esta nueva controversia surge en medio de un complejo escenario político, donde la figura de Cristina Fernández de Kirchner continúa siendo muy influyente.
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La lista denominada “Federales, un grito de corazón”, liderada por el riojano, tomó la decisión de apelar la negativa de su candidatura ante la Junta Electoral partidaria. Esta acción busca que sea evaluada por la jueza electoral María Servini. Argumentan que si la justicia no les da la razón, no dudarán en escalar su recurso hasta la Corte Suprema.
En concreto, piden que se haga a lugar al pedido de dictado de Medida Cautelar de No Innovar del proceso electoral, y que se suspendan las internas hasta que finalice el proceso judicial que iniciaron este lunes y que “no se declare ganadora a la lista Primero la Patria”.
Por eso, plantearon que de corresponder se debe “intimar al Partido Justicialista a presentar un cronograma electoral que no vaya más allá del vencimiento de los actuales mandatos; que garantice la transparencia y participación de los afiliados justicialistas en todos los distritos del país”.
La Junta Electoral decidió este domingo impedir la participación de Quintela y dejar como lista única “Primero la Patria”, que lleva la candidatura de Fernández de Kirchner. “Proscribieron la lista porque saben que ni en la provincia de Buenos Aires ganan”, dijo Jorge Yoma, uno de los apoderados gobernador de La Rioja, al medio TN.
Los apoderados de la lista “Federales” han hecho hincapié en diversas irregularidades, entre las que destacan violaciones a la cadena de custodia de los avales presentados y falta de canales de comunicación abierta entre las candidaturas. Denuncian también la carencia de políticas que respalden la integridad del proceso electoral y la parcialidad en el trato dado a las diferentes listas.