Referentes mapuches le solicitaron una reunión al presidente Alberto Fernández “para evaluar el resultado de la mesa de diálogo que él mismo propició” a fin de resolver el conflicto en Villa Mascardi.
En la nota, resaltaron que ya pasaron ocho meses del desalojo y más de 60 días desde la última mesa de diálogo en febrero en Bariloche. “De manera unilateral, las instituciones estatales fueron aplazando fechas al día de hoy. Pu lamuen siguen detenidas junto a sus niños, el resto de la comunidad continúa en una incertidumbre jurídica y el rewe sigue militarizado para negarnos la posibilidad de su cuidado y protección, en un estado de progresivo deterioro”, indicaron.
El último sábado, Orlando Carriqueo, referente del Parlamento Mapuche de Río Negro, confirmó que un abogado de la Secretaría de Derechos Humanos de Nación se había comunicado con ellos para anunciarles que la mesa de diálogo sería este martes en Buenos Aires. Horas después, desde el Inai (Instituto Nacional de Asuntos Indígenas) y el Ministerio de Seguridad les indicaron que la reunión quedaba suspendida. Por esta razón, decidieron enviarle una carta a Fernández.
En la nota, recordaron que el 12 de diciembre del año pasado, el mismo presidente recibió a la comitiva mapuche que relató “el dolor al ver militarizado el rewe de la machi Betiana Coluan Nahuel. Como le dijimos en aquella oportunidad, la aparición de una machi en una comunidad debería haber sido un hecho común y corriente para nuestra cultura, sin embargo, no lo es por el intento de genocidio que llevó a cabo el Estado argentino”.
Mencionaron también que Fernández instruyó a la Secretaría de Derechos Humanos para coordinar la mesa de diálogo, formalizó el nombramiento de la presidencia del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas -que hasta ese momento continuaba acéfalo-, estableció un cronograma con las próximas fechas de encuentro y ordenó un nuevo encuentro en Casa Rosada para evaluar el resultado de la mesa, a los sesenta días de ese 12 de diciembre, que nunca se formalizó.
“Las reuniones subsiguientes fueron inéditas en el trato entre Estado y Pueblo Mapuche Tehuelche. Pudimos discutir y abordar cada uno de los temas con respeto, tolerancia y siempre tratando de que las diferencias de cultura no sean un impedimento para discutir políticamente”, plantearon.
Destacaron que, en la segunda reunión de la mesa de diálogo, el 10 de febrero en Bariloche, se acordó la restitución del rewe y un próximo encuentro el 24 de febrero para firmar el acuerdo.
“El desarrollo de esta Mesa de Diálogo tuvo repercusión nacional e internacional, puesto que, por primera vez, el Estado dejaría de utilizar el Código Penal para resolver un conflicto territorial con los pueblos indígenas. Se trataba de una discusión política y madura que auguraba un final prometedor para la coexistencia democrática entre diversos actores políticos”, concluyeron.
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