Cuando hablamos de nuestras mascotas, a muchos se nos llena el alma de felicidad. Estos seres llegan a la vida con plenitud y lealtad. Una de las personas que más amor tiene por los animales es Celina Barboza. La joven de 24 años que vive en Rivadavia, en la actualidad tiene 9 perros a quienes ama profundamente, en comunicación con Diario 13 comentó la llegada de ellos a su vida y profundizó sobre la tenencia responsable de animales.
La llegada de la primera mascota fue cuando era pequeña. Una psicopedagoga le recomendó a su mamá que para mejorar el comportamiento de su hermano debían darle responsabilidades y una de las posibilidades era tener un perro. En este caso le consiguieron un dóberman enano, quien revolucionó la familia. Celina comentó en este medio: ‘me dieron muchos celos que él tuviera una mascota y yo no, por eso mis padres me regalaron una hembrita de la misma raza’.
En un momento, la familia vendió las crías que llegaba a tener la parejita, pero al ver el menosprecio o catalogación que hacían las personas que iban a llevárselos, dejaron de hacerlo. Fue así como la familia creció exponencialmente. Claramente, la cantidad ameritaba un cuidado especial, por ello es por lo que Celi y sus padres comenzaron a averiguar qué era necesario para que los perritos estén bien y felices.
Hasta allí tuvieron 7 mascotas, luego llegó una perrita que cuidaron con mucho cariño. Pero la mayor revolución llegó con la novena mascota. Esta era una perrita sin raza aparente que deambulaba por su barrio con hambre. ‘Se le notaban los huesitos, por eso comenzamos a alimentarla’ confesó Celi, que no pudo al ver estado del can.
Sin darse cuenta, día a día la perrita llegaba a su casa para buscar alimento y cariño. Sin darse cuenta se quedó. Sin embargo, al ver la llegada del invierno le pidió a su papá si por el frío podían ingresarla, ‘le pedimos que la dejara estar adentro por la estación, en verano o cuando comenzara el calor la volveríamos a largar’ relató la joven. La perra se metió en el corazón de la familia, y la bautizaron como ‘flaca’.
Este nuevo paso tuvo como consecuencia que la llevarán al veterinario para que tenga las vacunas necesarias. Pasó el tiempo y lo que iba a ser solo unos meses, quedó atrás. En ese periodo fue cuando se enteraron de que la nueva integrante estaba embarazada de 8 cachorros. En ese entonces decidieron que iban a darlos en adopción, pero solo a quienes sean responsables, caso contrario buscarían otra familia.
En sus recuerdos se le cruzó una anécdota respecto a una de las cachorras que vive en su casa. ‘Una de las perras había tenido crías y las tenías un tiempo hasta conseguirle una nueva familia. Había una muy india que saltaba una puerta reja que tenemos. Una de esas veces se cayó de hocico y se rompieron los dientes de leche. De inmediato la llevamos al veterinario. Él nos dijo que iban a volver salir. Cuestión que nadie la quiso llevar porque no tenía dientes y ahora es mi mañosa. Se llama pirucha’ sumó Celina.
La joven con su familia pregona la responsabilidad con las mascotas, por ello hacen seguimiento de los cachorros que dan en adopción. En muchos casos consideran que es una locura tener tantos en casa, pero el tamaño del hogar ayuda a que todos estén cómodos y los perros tengan un ambiente de protección.
Hoy en su casa viven 9 canes, cada uno con su diferencia, con sus vacunas y controlados por un veterinario que va periódicamente a su vivienda. Los perritos son familia, y en su día, Celina no dudo en comentar su historia.
Celi confesó a este medio que para ella cada uno de los animales son sus compañeros del día a día y no concibe su vida sin ellos. Gracias a su cariño, ella puede dar un mensaje de que con amor y responsabilidad se puede criar más de una mascota.