El pasado viernes 5 de mayo culminó el debate en el que un hombre recibió una pena por el delito calificado como abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo, en concurso ideal con el delito de corrupción de menores.

«La víctima (su identidad se preserva), ahora podrá cerrar una etapa de su vida y despertar con otras esperanzas. Es una chica muy capaz y preparada, todo esto hará que retome sus estudios y sea la persona que ella siempre quiso ser, es una chica muy capaz y muy valiente», señaló emocionado, en sus alegatos finales, el auxiliar de fiscal, Pedro Landivar, quien intervino en representación de la Fiscal Conclusional, Estela Giffoniello.

A lo largo de las audiencias se conoció que los aberrantes hechos ocurrieron en 2012, cuando la víctima tenía 12 años. Testigos la calificaron como una niña brillante en sus estudios y deportista, con un gran futuro. Pero tuvo la desgracia de estar al cuidado de su papá, una persona manipuladora y violenta, con una personalidad perversa.

«Los ataques de abusos sexuales tienen entidad suficiente para demostrar que el imputado abusó y corrompió a su propia hija. En el transcurso del debate se ha logrado desenmascarar a esta persona. Su estrategia era mostrar preocupación por su hija, al mismo tiempo la amenazaba con matar a su mamá para que no diga nada. Todo esto fue acreditado por más de cuatro psicólogos que intervinieron en diferentes informes», concluyó el investigador.